El juez encarcela a la cuidadora del niño discapacitado muerto en Sevilla
La joven afirma que dejó solo al menor dos días porque perdió la llave
La joven de 20 años detenida el lunes tras la muerte de un niño con parálisis cerebral al que cuidaba en Sevilla ingresó ayer en prisión. Tras tomarle declaración, el juez le imputó los delitos de abandono de un menor y homicidio imprudente. El abogado de la detenida explicó que ésta dejó solo al menor dos días porque perdió las llaves tras dejárselas a un joven en una discoteca. Cuando los padres regresaron, encontraron al niño muerto y solo.
El juez también imputó de los mismos delitos a J. M. M., el joven ecuatoriano de 19 años al que I. C., de nacionalidad boliviana, entregó las llaves. J. M.M. quedó en libertad sin fianza, pero con la obligación de personarse en el juzgado dos veces al mes.
Tras dos días de versiones contradictorias de la niñera a la policía, las comparecencias de ayer aclararon que el niño, de nueve años, había permanecido solo desde el sábado por la noche hasta el lunes por la tarde, día en que fue hallado muerto. La joven, que trabajaba en esta casa desde hacía dos meses, había quedado a cargo del menor desde la tarde del sábado, cuando el padre viajó a Ceuta para reunirse con el resto de la familia.
El abogado de oficio encargado de defender a los dos jóvenes, José Ignacio Ruiz, explicó que la niñera, que se encuentra de forma irregular en España, fue a una discoteca con una amiga el sábado por la noche. Allí conoció a J. M. M., con quien bailó y charló. La joven, como garantía de que volverían a verse, ofreció al chico las llaves que llevaba, pertenecientes a la casa de los padres del menor, antes de ir al baño. Él, a a cambio, le entregó su tarjeta de la Seguridad Social.
La joven asegura que, al salir del servicio, vio a J. M. M. con otra chica y no se atrevió a acercarse. Entre el tumulto, relató, lo perdió de vista. Éste, aclara su madre, regresó a casa "borracho", hacia las 10.30 del domingo. "Me dijo, entre risas, que las llaves eran de una chica de la que se había hecho novio esa noche", afirmó María Cruz Sangurima, madre del joven.
J. M. M. fue el miércoles a la comisaría, después de que la policía llamara a su casa, alertada por la tarjeta que halló entre las pertenencias de la joven. "Sólo saqué a bailar a una chica", argumentó ayer a la salida del juzgado.
La niñera pasó la noche del sábado con una amiga. Explicó que dedicó el domingo a tratar de recuperar las llaves y pernoctó en casa de un primo. El lunes, a las 16.30, recibió en su móvil la llamada de la familia, que la avisó de que llegaría a las 19.00. Ella mintió entonces y aseguró que debía volver a su país porque su madre había muerto. A las 22.00, dos horas después de que los padres hallaran al niño muerto, la joven regresó a la vivienda y fue detenida.
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