Trabajadores de RTVE se unen contra la "salvaje reconversión"

Más de un centenar de trabajadores de RTVE han suscrito un manifiesto contra el ajuste laboral firmado por la dirección de la empresa, la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los sindicatos. Bajo el título Nosotros decimos no, critican la "salvaje reconversión" que recortará en 4.150 los empleos y proponen que se aplique la salida "voluntaria" de aquellos que lo deseen. Tras conocer la plantilla que permanece se vería si sobran profesionales -"como dice la SEPI"- o si faltan para "poder producir los mínimos de programación y de producción que exige un servicio público".

Los firmantes (alrededor de 130) se oponen a que se excluya "de manera forzosa a un número de acreditados y honestos trabajadores" y sostienen que discriminarlos por razón de edad "niega los derechos constitucionales" y es "una medida arbitraria e injusta que lo único que hace es contribuir no a salvar la RTVE, sino a deteriorarla".

Alegan que la crisis por la que atraviesa la empresa se debe fundamentalmente al "abandono de la necesaria financiación por los sucesivos Gobiernos" y a "la mala gestión de las direcciones que han pasado por RTVE sin que los partidos políticos mayoritarios (PSOE y PP) que las nombraron hiciesen nada por remediarlo".

Entre los firmantes figuran directores y realizadores como Patricia Ferreira, Adolfo Dufour, Julio de Benito, Rafael Herrero o Juan Manuel Martín de Blas; productores como Alberto de Masy, Charo González o José Ongay, y periodistas como Federico Volpini, José Manuel Martín Medem o Alfredo Gabrieli. Montadores, directores de fotografía, administrativos y operadores de sonido, entre otros, también se han adherido.

Informe de los 'sabios'

Estos profesionales rechazan el expediente de regulación de empleo, que prevé la salida de los mayores de 52 años, porque "va en contra y desprecia" las conclusiones del Comité de sabios que elaboró un dictamen sobre la reforma de RTVE. Además, afirman que con los trabajadores salientes, el Estado no se ahorra nada. "Tan sólo se les expulsa de su puesto de trabajo y se priva a la sociedad de sus rendimientos". Reclaman que tras ver las personas que quieren ejercer "su legítimo derecho a marcharse" se abra una negociación "serena y equitativa, con criterios profesionales y de producción y con objetivos empresariales". ]

Por su lado, el secretario general de CC OO, José María Fidalgo, admitió ayer que en todos los ajustes laborales hay "situaciones muy injustas", ya que se "obliga a salir a gente muy productiva y estratégica". En declaraciones a Servimedia, consideró "escandaloso" que haya que "adelgazar" RTVE cuando existen tantas radios y televisiones autonómicas.También ayer, el Consejo de Administración del Ente Público acordó encargar un informe a los servicios jurídicos del Estado para dilucidar si aquel organismo tiene competencias sobre la composición de las plantillas.