Europa aborda el espionaje por EE UU de datos bancarios

"El clima de deterioro respecto a la privacidad y protección de datos" creado por las medidas aplicadas por EE UU en la lucha contra el terrorismo es uno de los aspectos más destacados de la resolución que aprobará hoy el Parlamento Europeo en el caso Swift. El debate se ha suscitado a raíz de descubrirse las peticiones de información solicitadas por el Gobierno de Washington relacionadas con las transferencias financieras canalizadas en Europa a través de la compañía belga Swift. La compañía tenía el monopolio de todas las transferencias europeas en la UE.

En su intervención en la Eurocámara, el comisario italiano, Franco Frattini, manifestó que no tenía conocimiento de estas actividades y que la transmisión de datos particulares en las transferencias financieras estaba cubierta por una directiva comunitaria. No obstante, señaló que sería conveniente esperar la investigación de las autoridades belgas y según sus conclusiones considerar la elaboración de un nuevo marco jurídico para cubrir las posibles lagunas existentes. Las prácticas descubiertas han creado malestar entre los diputados que se han dirigido al Banco Central Europeo para preguntarle si era consciente del acuerdo secreto entre Swift y el Gobierno de EE UU.

Los diputados expresaron su preocupación porque el amplio manejo de datos por parte de Swift permite detectar no solo las transferencias vinculadas a las actividades ilegales, sino también información de actividades económicas o de individuos que podrían permitir distintas formas de espionaje industrial y económico a gran escala.

En el proyecto de resolución se subraya que toda la transmisión de datos personales a terceros países está sujeta a una normativa de protección de datos a nivel nacional y europeo. En este sentido, se recuerda que las transferencias de datos deben ser autorizadas por una autoridad judicial y una derogación de esta norma debe ser "proporcional y apoyada en una ley o un acuerdo internacional".