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Reportaje:El debate entre los demócratas de EE UU

Los 'blogs' radicales asaltan el Partido Demócrata

Una 'guerra civil' en Connecticut descubre la fuerza de la militancia organizada en Internet

Joe Lieberman lleva 18 años en el Senado; en 2000 fue candidato a la vicepresidencia con Al Gore y en 2004 aspiró a la Casa Blanca. Pero su escaño, que debe renovar en noviembre, está en peligro: no por el electorado -Connecticut tiene garantizada la mayoría demócrata-, sino por la base del partido, que puede dejarle en la calle en las primarias del 8 de agosto.

Lieberman es uno de los últimos jacksonianos -demócratas al estilo del senador Scoop Jackson, muy conservadores en política exterior- y apoya a Bush en Irak. Irak es clave en las legislativas de noviembre para los dos partidos. A pesar de la impopularidad de la guerra, los republicanos creen que su mejor opción es una fuga hacia adelante, y lo plantean en términos patrióticos: irse de Irak ahora es abandonismo. Los demócratas se dividen: la minoría cree que hay que fijar un calendario de repliegue ya; la mayoría considera que hay que retirar las tropas, pero sin fechas, y cuando se afiance el Gobierno de Bagdad (una posición no muy alejada de la de Bush, pero que la Casa Blanca manipula por razones partidistas).

Las bases demócratas más activas, contrarias a la guerra de Irak, ocupan la 'blogosfera'
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Las bases demócratas más activas, decididamente contra la guerra, ocupan la blogosfera, siguiendo los pasos del relámpago de Howard Dean -ahora presidente del partido- en 2003. Su energía es desbordante, y su impacto preocupa a algunos: ¿está la ciberbase tomando las riendas del partido?

En el caso de Connecticut, eso es lo que parece: los grupos más capaces, como MoveOn.org, y los blogs más leídos de la izquierda internauta, como el Daily Kos, han apostado por derribar a Lieberman y apoyar a su rival, el adinerado empresario Ned Lamont. Lo que iba a ser un paseo para el primero se ha convertido en un vía crucis. La blogosfera crepita: "Lieberman es un lameculos de Bush y su fracasada guerra le hará caer con todo el equipo... Es un vendido, un traidor al partido y a la democracia". "Con amigos como éste, quién necesita enemigos". "Lieberman puede agarrar su sionismo y metérselo por donde le quepa". Otras campañas contra demócratas moderados o figuras del partido, desde Harry Reid hasta Hillary Clinton, se multiplican en la web, además de, obviamente, tremendos ataques contra Bush, Rove, Rumsfeld y demás. En un año atípico -raramente las legislativas atraen tanta atención-, el ejército de blogueros puede influir en las elecciones.

El disparo de salida para que la ciberbase demócrata asaltara el partido lo dieron a finales de febrero Markos Moulitsas Zuniga, un ex militar californiano de 35 años dedicado a la alta tecnología, y Jerome Armstrong, un empresario de 42 -apodado The Blogfather por los que le señalan como la cabeza de la Mafia de los Blogs- con la publicación de Crashing the Gate (Entrar sin permiso), subtitulado Bases tradicionales, bases digitales y el ascenso del poder popular en la política. "Estamos en el comienzo de un cambio total del Partido Demócrata, dirigido por outsiders comprometidos con el progresismo", anunciaron en este texto de culto para el cibernauta progresista.

De este caldo de cultivo ha salido la pelea a muerte contra Lieberman y similares. El blog interactivo de Moulitsas, DailyKos.com, supera el medio millón diario de entradas, y a primeros de junio se consagró convocando una conferencia de blogueros izquierdistas en Las Vegas, YearlyKos, a la que asistieron un millar de personas y por la que se pasearon Howard Dean y varios aspirantes a la candidatura presidencial demócrata. La capacidad de movilización de la ciberbase, su habilidad para reclutar voluntarios y recoger fondos, impresiona a los senior del partido: algunos maldicen a los cibericonoclastas y otros se les acercan para tenerlos de su lado.

Armstrong, creador de un blog pionero en 2001, MyDD.com (My DirectDemocracy), trabajó con Joe Trippi, que lanzó al ciberespacio a Dean, y ahora es consultor; entre sus clientes está Mark Warner, el hombre que quiere ganarle a Hillary Clinton la nominación. Armstrong cree que los ciberactivistas se consideran cada vez más "accionistas de una empresa llamada Partido Demócrata", y que "ya es hora de pedirle cuentas al Consejo de Administración". Es difícil saber el número de la ciberbase militante, pero se calcula entre cinco y siete millones de personas.

¿Son Armstrong y Moulitsas los nuevos estrategas de un partido ansioso de volver al poder en el Congreso y en la Casa Blanca? Eso es lo que creen comentaristas como el conservador David Brooks, que escribió en The New York Times que el creador del DailyKos "se sienta ante su ordenador y da órdenes a sus seguidores, escuadrones de rabiosos corderos dispuestos a descargar su veneno sobre quienes se les crucen. Así es como cree haberse convertido en una fuerza muy poderosa ante la que todo el mundo tendría que arrodillarse".

"Yo soy un poco escéptico de toda la fuerza que se les atribuye a estos blogs", dice Harvey Kaye, director del Centro de Historia y Cambio Social de la Universidad de Wisconsin. "La pregunta que hay que hacerse, en el caso de Lamont y Lieberman, es: ¿se debe a la actividad de los blogs, o refleja otra dinámica que ya estaba en marcha, la del descontento con la guerra?".

Es verdad, añade Kaye, "que Internet es un gran vehículo de lanzamiento de ideas y de debate, pero es un debate público: por definición, no es el sitio de la estrategia, ni se puede considerar nuevos estrategas a sus promotores o sus estrellas. La política en Internet tiene muy poco que ver con la estrategia, y mucho con generar interés y entusiasmo. En otras palabras, Internet y los blogs se han convertido en una manera de movilizar a la gente".

¿A qué gente? "Además de blancos y acomodados, los lectores medios del Daily Kos tienen 45 años", escribió Ryan Lizza en The New Republic on line -una tribuna demócrata moderada- sobre la reunión de Las Vegas. "Los líderes y las caras públicas de la blogosfera izquierdista son jóvenes, y su audiencia es madura: los veinteañeros y treintañeros han creado un espacio para que los cuarentones y cincuentones de la vieja izquierda reconecten con el activismo político de su juventud". Lizza cree que Armstrong y Moulitsas están en pleno proceso de integración en el conglomerado político que tanto critican.

Mientras tanto, en la también activa blogosfera conservadora -indómita y faltona como la que más, pero disciplinada- se celebra el asalto de las ciberbases demócratas: "El Daily Kos sigue deteriorando implacablemente al establishment demócrata", se lee en Flares into Darkness. "Es una excelente noticia para los republicanos".

El senador demócrata Joseph Lieberman (izquierda) y su rival político, el empresario Ned Lamont.
El senador demócrata Joseph Lieberman (izquierda) y su rival político, el empresario Ned Lamont.ASSOCIATED PRESS

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