Acuicultura sin fronteras
Pescanova instalará una granja en Portugal ante la prohibición de ubicarla en Galicia
Hasta hace unos años, las capturas en el mar eran casi la única fuente en el suministro de pescado de Pescanova. En la actualidad, la acuicultura supone ya casi el 30% en el aprovisionamiento de los productos de la pesca y las previsiones es que en el plazo de 10 años la producción de las granjas supere las capturas en el mar. Todo ello con el desarrollo de una política de inversiones en todo el mundo y muy especialmente en Latinoamérica y en la península Ibérica.
El objetivo a medio plazo es lograr una producción acuícola de 180.000 toneladas, donde destacan salmón, langostino y rodaballo
Actualmente el grupo gallego es la quinta empresa pesquera del mundo con 100 barcos y unas capturas medias de 130.000 toneladas
Con una flota formada por un centenar de barcos ubicados en algunos de los caladeros más ricos del mundo y unas capturas variables según campañas, pero con una media de unas 130.000 toneladas, Pescanova es la primera empresa multinacional comunitaria en el sector de la pesca y la quinta del mundo por detrás de los grupos japoneses.
La empresa gallega fue pionera en la búsqueda de caladeros fuera de aguas españolas y comunitarias en los años sesenta mediante la constitución de sociedades conjuntas en terceros países para operar prácticamente al margen de los acuerdos comunitarios o españoles. En esa misma línea, el grupo gallego ha sido igualmente pionero en el desarrollo de la acuicultura, tanto en aguas de la Península como en terceros países y muy especialmente en Latinoamérica.
"Los datos mundiales sobre la evolución de las capturas de la pesca y la producción en acuicultura ponen de manifiesto cada vez más que, al igual que sucede en la ganadería, la cría y engorde de los peces constituye la alternativa para mantener la oferta. De acuerdo con esta situación, en Pescanova venimos apostando por el desarrollo de la acuicultura", señala el presidente y director general del grupo, Manuel Fernández de Sousa-Faro.
En la actualidad, las principales producciones en acuicultura de la empresa gallega se hallan en España y en los países latinoamericanos con un volumen total por debajo de las 40.000 toneladas. De esa cifra, el grueso de la producción corresponde al salmón en Chile, con unas 30.000 toneladas, a las que se suman otras 5.000 toneladas de rodaballo en las costas gallegas, otras 1.000 toneladas de langostino en la zona sur de la Península y en Suramérica y 1.000 toneladas más de tilupa en Brasil.
Plan para la acuicultura
De acuerdo con las mayores dificultades que existen para buscar nuevos caladeros, el grupo Pescanova está desarrollando un plan de expansión en la acuicultura con el objetivo a medio plazo, 10 años, de producir unas 180.000 toneladas tanto en aguas de la Península.
Para la ubicación de las granjas, la empresa gallega tiene en cuenta diferentes factores. Se analiza, en primer lugar, la calidad de las aguas y las condiciones de las costas. A partir de un enclave adecuado, se consideran otras circunstancias como la situación de cada mercado, posibilidades de exportación, coste de las materias primas para la alimentación animal y el propio comportamiento de la moneda en cada país.
En Chile, como punto de referencia en el salmón, se espera a medio plazo una producción de 120.000 toneladas. En el langostino, las ventas actuales del grupo se elevan a unas 30.000 toneladas frente a una producción propia de sólo 1.000 toneladas.La producción de langostinos en acuicultura se pretende elevar hasta un nivel de autoabastecimiento para cubrir sus ventas especialmente con las granjas en Nicaragua. En la producción de tilupa se quiere pasar a medio plazo de 1.000 a 10.000 toneladas con instalaciones en la costa de Brasil. Finalmente, en la producción de rodaballo como pez plano de referencia, el objetivo del grupo es pasar de las actuales 5.000 toneladas a 30.000 toneladas, tanto en las costas españolas como en Portugal.
El grupo Pescanova tiene un plan de expansión para la acuicultura en la costa atlántica que va desde las costas de Portugal hasta Asturias, donde Galicia ocupa un lugar de referencia para la producción de rodaballo. En esta estrategia, el grupo puso en marcha los trabajos para la ubicación de una gran granja acuícola en el marco del Plan gallego de parques tecnológicos acuícolas para una producción de entre 5.000 y 7.000 toneladas con una inversión de unos 40 millones de euros.
La instalación de esta granja en el municipio coruñés de Muxía, en el cabo Touriñán, contó en su día con todos los permisos del Gobierno anterior del Partido Popular. Sin embargo, con la llegada del nuevo Gobierno, formado por socialistas y el Bloque Nacionalista Gallego, se ha procedido a una revisión de este plan donde una gran parte de la costa se halla incluida en la llamada Red Natura o zonas de especial protección.
La prohibición del desarrollo de este proyecto en aguas de Muxía dio lugar a que los responsables del grupo iniciaran conversaciones con los responsables en el sector de la pesca en Portugal para poner en marcha en ese país granjas para la producción a corto plazo de unas 4.000 toneladas de rodaballo. Estas conversaciones dieron lugar a un primer compromiso entre ambas partes por el cual la empresa gallega iniciará la instalación de granjas en la costa portuguesa de acuerdo con la ordenación ya existente en las mismas
"Tenemos un plan para el desarrollo de la acuicultura en la costa atlántica en la península Ibérica y lo vamos a desarrollar. Nosotros dependemos de los accionistas con quienes tenemos un compromiso en el acuicultura. No podemos esperar", señala el consejero delegado.
La inversión que va a realizar el grupo en aguas portuguesas, no va a suponer dejar a un lado las inversiones en el sector de la acuicultura en Galicia para la producción de peces planos. Pescanova mantiene sus proyectos de más inversiones en la costa gallega, pero siempre que los lugares asignados por la Xunta sean los adecuados para la producción de este tipo de peces.
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