CiU convoca a Galeuscat para defender el 'sí' del nacionalismo
Convergència i Unió (CiU) se rodeó ayer de sus socios del Partido Nacionalista Vasco (PNV) y el Bloque Nacionalista Galego (BNG) -aliados en la plataforma Galeuscat- para escenificar que el nacionalismo apoya en su conjunto el nuevo Estatuto catalán porque nunca ha desperdiciado cualquier avance del autogobierno de sus respectivas comunidades. "Somos nacionalistas de pura cepa y todos los que estamos aquí también podemos decir sí al Estatuto", proclamó el líder de CiU, Artur Mas.
Fue una exhibición de unidad con un único destinatario, Esquerra Republicana de Catalunya, formación que todos los oradores convirtieron en blanco de sus invectivas. Y en un simbólico marco, el Fossar de les Moreres, donde yacen los defensores de Barcelona durante el asedio de las tropas de Felipe V en 1714 y donde los republicanos celebran la Diada de l'Onze de Setembre.
El mensaje de los nacionalistas fue repetitivo: no entienden por qué un partido catalanista como Esquerra puede dar la espalda a un Estatuto que, como recalcaron Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida, otorga a Cataluña el mayor nivel de autogobierno en 300 años y la reconoce como una nación.
El objetivo de CiU es simple: recabar apoyos entre votantes republicanos. Mas y Duran se esfuerzan en cada mitin para poder alcanzar esta meta. Lo hacen, como ayer, a base de una de cal y otra de arena. "Incluso para nosotros el Estatuto del 30 de septiembre [aprobado en el Parlament] no es todo lo que queremos" y "no tenemos limitaciones en la ambición nacional catalana" fueron los guiños a ERC que lanzaron los dirigentes de CiU.
Término 'nación'
Por el contrario, Duran y Mas elevaron ayer el tono de sus críticas a Esquerra. "Puigcercós [secretario general de ERC] estaba dispuesto en Madrid a renunciar al término nación y aceptar realidad nacional o comunidad nacional. ¡Si hasta los del PSOE nos lo decían!", desveló Duran. Y Mas remachó: "Desde un profundo sentimiento de patria y voluntad de construir una nación, no se puede decir no". El líder de CiU apeló al espíritu de los ex presidentes Francesc Macià, Josep Tarradellas y Jordi Pujol para reclamar el apoyo al nuevo texto.
En estos ataques, los dos dirigentes de CiU tuvieron un fiel aliado, el gallego Anxo Quintana. El líder del Bloque Nacionalista Galego, que se deshizo en argumentos a favor del sí, arremetió contra ERC por haber antepuesto el "vector derecha-izquierda al del nacionalismo" y por eso, afirmó, los republicanos "acaban equivocándose siempre".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.