Ahmadineyad y Chávez, aliados contra Washington

No hay nada como tener un enemigo común para que ciertas alianzas se refuercen, y más si ese rival es EE UU. El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, y su homólogo venezolano, Hugo Chávez, hablaron en la noche del martes largo y tendido por teléfono y acordaron apoyarse mutuamente en los foros internacionales. Durante la conversación, según relató ayer la radio estatal iraní, el mandatario iraní agradeció al presidente de Venezuela el apoyo frente a los ataques verbales y diplomáticos de Washington en el conflicto nuclear iraní.

"Nosotros tenemos muchos ideales y propósitos comunes que nos unen profundamente. Por otra parte, las posturas de los enemigos de nuestros dos países son cada vez más débiles", dijo Ahmadineyad, según la emisora. El mandatario iraní reiteró la importancia de que los "gobiernos independientes se unan para defender a los intereses de sus pueblos". "Nosotros actuaremos dentro de la legalidad para obtener una tecnología nuclear para fines pacíficos", añadió el presidente iraní.

Venezuela e Irán eran ya muy cercanos políticamente hablando aun antes de que se desatara la crisis nuclear. Ambos países son pesos pesados dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y desde que la cotización del crudo comenzó a subir como la espuma, aun antes de la invasión a Irak de 2003, han sido los más reacios a ceder a las presiones de Occidente, en especial de la Casa Blanca, para elevar la oferta de crudo y forzar una rebaja del precio.

Respecto al cierre del diario Iran por publicar una viñeta que mostraba a una cucaracha hablando azerí, la lengua de un grupo étnico del país, y la detención de su director y el caricaturista, Ahmadineyad dijo: "Deben saber que no serán capaces de provocar divisiones, a pesar de sus intentos desesperados, en la querida nación iraní".