Giner reclama a Barberá 3,4 millones de deuda y amenaza con exigir intereses
El presidente de la Diputación de Valencia, Fernando Giner, ha exigido por escrito a la alcaldesa de la capital, Rita Barberá, ambos del PP, el pago de una deuda de 3,4 millones de euros por publicaciones en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) y ha amenazado con acudir a cauces legales para recuperar el dinero adeudado e incluso con reclamar el pago de los intereses de demora. En un decreto firmado recientemente, Giner señala que en el año 2000 el BOP sumaba una deuda de 5,5 millones de euros y que ese año se instauró un sistema informático que ha permitido reducirla. Y señala: "Si bien es cierto que se hizo un importante esfuerzo por parte de los Ayuntamientos afectados, no ocurrió lo mismo con el Ayuntamiento de Valencia".
La deuda del Ayuntamiento de Valencia es "insostenible desde el punto de vista financiero de la Diputación", explica Giner, que añade: "El Ayuntamiento de la capital no puede seguir manteniendo ese nivel de deuda por el boletín y, lo que es peor, sin ningún interés por cancelarla en los últimos años, por todo ello debe procederse a exigir el importe que actualmente está pendiente (...) de forma íntegra e inmediata o proceder a utilizar los cauces de la misma con aplicación de los correspondientes intereses de demora".
El escrito explica que el montante de la deuda que le exige al Ayuntamiento de Valencia -los 3,4 millones de euros- lo estableció en el año 2000 el entonces delegado de Economía de la Corporación provincial, el popular Silvestre Senent, que en la actualidad es el responsable del área de presupuestos del equipo de gobierno municipal de Barberá en el Ayuntamiento.
Josep Bort, diputado en la Diputación en representación de Esquerra Unida-L'Entesa, califica la situación de "absurda" porque, según señala, a Senent, "antes, cuando estaba en la Diputación, le parecía inaplazable la liquidación de la deuda, pero ahora que tiene la responsabilidad de hacerla efectiva ha decidido que es mejor continuar engordando la deuda para ahogar las cuentas de la Diputación de Valencia y poner en peligro la publicación del BOP, que, además, es obligatoria". Bort considera "increíble que las administraciones mantengan este conflicto, cuando son las primeras obligadas a demostrar que las deudas se han de pagar".
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