Pla falangista y Pla liberal
"Las cosas más elementales a veces pasan inadvertidas", nos avisa de entrada Jordi Gracia en EL PAÍS del 17 de mayo de 2006 sobre la colaboración de José Pla en el diario falangista Arriba en 1940. Al profesor inquisidor le ha pasado inadvertido que en 1940 había dos Plas escribiendo. Uno era el falangista José Pla que se ha confundido con Josep Pla, que, por imposición de la censura, también tenía que firmar como José Pla. José Pla Comas trabajaba en la Delegación de Prensa y Falange de Gerona y publicó en Los Sitios, el 4 de febrero de 1940, 'Banderas que volvían', utilizado como arma contra Josep Pla, que nada tiene que ver, como reconocía el propio diario el 5 de septiembre de 1975.
En el volumen 45 de las Obras completas de Josep Pla, mi padre editor, Josep Vergés, explica lo que era el año 1940: "Mi inolvidable amigo Jaume Vicens Vives nos decía a Josep Pla y a mí: 'Hemos de luchar por el liberalismo, por la catalanidad sin límites y el retorno a formas democráticas de convivencia'. Estas palabras tan simples y tan naturales, ¿puede alguien imaginarse lo que significaban el año 1940? ¿Lo que era ser anglófilo y no germanófilo? ¿El fascismo y la Gestapo? El tiempo ha pasado y lo ha borrado todo". Josep Pla escribía a mi padre: "¡Qué puerta más estrecha hemos pasado! He podido conocer más o menos toda la lira histórica de la centuria y espero que me creerás si te digo que lo que ha pasado no es precisamente apto para menores. Hemos de mirar de ver si podemos conseguir con una cierta dignidad vivir en una sociedad que moleste lo menos posible. Sea como fuere, unas cuantas personas a empujones y rodando hemos hecho un papel (Destino) que lleva muchos años de existencia. Hemos pasado por momentos difíciles, pero aún vivimos".
Mi padre, propietario de Destino, le escribía en el año 1940: "Es muy posible que el tono del diario ha de ser éste. Todo artículo que por una u otra razón moleste al régimen es un buen artículo". Pla fue el escritor más censurado de Destino, escribía mi padre, y lo confirma el que fue director Néstor Luján en sus dietarios: "Josep Pla y yo fuimos con mucho los más tachados". De un artículo mutilado decía el director liberal: "Yo lo escribí bien claro y se entendía a la perfección. Pero al verlo en el periódico tampoco ni yo mismo lo reconocí, pues quedó en letras de molde, así como el gallo de Morón, sin plumas y cacareando".
