El arte rococó de Corrado Giaquinto, en el Palacio Real

El Palacio Real de Madrid tiene frescos monumentales del pintor napolitano Corrado Giaquinto (1703-1765) en la escalera principal, el salón de columnas y la capilla real, realizados para Fernando VI durante su estancia de nueve años en España. Los bocetos para estos techos se encuentran en la exposición Corrado Giaquinto y España, abierta en las salas temporales (Bailén, s/n, www.patrimonionacional.es, hasta el 25 de junio), que reúne 75 pinturas de "una figura máxima de la trayectoria del arte pictórico y decorativo del siglo XVIII", según el historiador del arte Alfonso E. Pérez Sánchez, comisario de la muestra y director científico del catálogo. "Es un maravilloso y sensible artista que ha sido protagonista de la recuperación de la sensibilidad del rococó, cuya influencia llega hasta Goya".

Patrimonio Nacional, con 24 cuadros, y el Prado, con 16, han vuelto a unir sus fondos de Giaquinto, junto a los préstamos de museos italianos y coleccionistas particulares, para presentar en una exposición, en la que colabora la Fundación Santander Central Hispano, la trayectoria artística de "un puntal de la pintura española de la segunda mitad del siglo XVIII, cuya semilla se siente en Bayeu, Castillo, González Goya y Vicente López", según Alfonso E. Pérez Sánchez.

"La exposición es también un homenaje a Giaquinto, que llegó a Madrid en 1753, reclamado por Fernando VI y Bárbara de Braganza para completar la decoración del palacio real nuevo que no pudo empezar Giacomo Amigoni", declara el comisario. "Es un espíritu muy sutil y decorativo, de una delicadeza extrema, que la tradición académica relegó al olvido". El artista, primer pintor de cámara, fue director de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y de la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara.

Los modelos, las técnicas y el colorido de las obras de Giaquinto se pueden seguir desde las dos primeras salas del montaje, dedicadas a las primeras etapas de su formación en Nápoles con Lucas Jordán y el trabajo de frescos en Roma y Turín. Además de intervenir en distintos espacios del palacio real nuevo (que forman parte de la visita pública), en la exposición hay unos 40 cuadros religiosos, como Camino del Calvario, España rinde homenaje a la religión y a la Iglesia o La coronación de espinas, con salas para los oratorios del rey la reina en el palacio del Buen Retiro, y una veintena de tema mitológico, como Venus y Adonis o El nacimiento del sol y el triunfo de Baco, además de retratos, como el del músico Farinelli, y una silla de manos.

En el montaje se puede apreciar las relaciones de la pintura y la arquitectura, por la amistad de Giaquinto con los arquitectos Filippo Juvara, en Italia, y Juan Bautista Sachetti, en Madrid, de quien se expone la planta y una sección del palacio real nuevo, con los cambios en la gran escalera principal en tiempos de Carlos III y Carlos IV, además de paisajes con el edificio en la misma época del pintor.

El catálogo incluye textos de Pérez Sánchez, Jesús Urrea, Leticia de Frutos, Nicola Spinosa y José Manuel Barbeito, autor del montaje, sobre Giaquinto en España e Italia, su trabajo en la fábrica de tapices y el Madrid y los palacios donde pintó, además de sus obras en las colecciones reales.