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Los nuevos pisos deberán obtener hasta un 70% del agua caliente de la energía solar

Las normas contra el ruido quedan fuera del nuevo Código Técnico de la Edificación

Los nuevos pisos deberán tener instaladas placas solares para obtener entre el 30% y el 70% del agua caliente que necesiten de la energía del sol, en función de la zona geográfica y otras circunstancias. El nuevo Código Técnico de la Edificación aprobado ayer por el Consejo de Ministros actualiza la normativa actual (de los años setenta) e incorpora exigencias para hacer los edificios más habitables y respetuosos con el medio ambiente. Pero los requisitos para proteger a los ciudadanos del ruido, uno de los problemas más acuciantes en las ciudades, aún no han sido desarrollados.

"Todas las casas serán verdes", resumió ayer la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, para dar cuenta de la aprobación por el Gobierno del Código Técnico de la Edificación (CTE). Esta normativa entrará en vigor en cuanto se publique en el Boletín Oficial del Estado, pero se da al sector seis meses para aplicar los requisitos de ahorro energético y seguridad contra incendios y 12 meses para el resto. El CTE es de obligado cumplimiento para los nuevos edificios (tanto viviendas como oficinas, industrias o aeropuertos) y para los que sean sometidos a rehabilitación integral.

La nueva norma consta de una parte general (en la que, por ejemplo, se especifica la documentación que debe incluir un proyecto) y 10 documentos básicos que desarrollan los requisitos que deben cumplir las casas.

Esos documentos son los siguientes:

- Ahorro de energía. El más novedoso, ya que obliga a que los edificios dispongan de paneles solares para aportar entre el 30% (norte) y el 70% (sur) del agua caliente necesaria. Hay excepciones. Si un edificio queda en zona de sombra, debe compensar con otras energías renovables la falta de energía solar. Tampoco se obligará a instalar paneles en los edificios históricos que se rehabiliten. Asimismo se exige el aprovechamiento de la luz natural y mecanismos de ahorro de agua.

- Cimientos. Se incluye la determinación de los estudios geotécnicos, obligatorios a partir de ahora para todos los edificios en general. Esos estudios, que sirven para prevenir los efectos de terremotos o deslizamientos del terreno, serán más exhaustivos y sujetos a unos requisitos comunes.

- Estructuras de fábrica. Determina las condiciones que se deben cumplir para construir con ladrillos o bloques de cemento, muy utilizados, por ejemplo, en las islas Canarias.

- Estructuras de madera. Constituye una absoluta novedad. Hasta ahora no estaba regulada en España la construcción en madera, que deberá contar con certificación medioambiental para garantizar su procedencia.

- Seguridad contra incendios. Los edificios de más de 80 metros de alto deberán tener un sistema automático de extinción del fuego.

- Seguridad de utilización. Se establecen los requisitos para evitar, por ejemplo, el riesgo de caídas por barandillas inadecuadas o suelos demasiado resbaladizos.

- Salubridad. Incluye las condiciones para evitar las humedades por condensación (aire) y por capilaridad (terreno), además de otros criterios sobre las salidas de gases, que no podrán ser instaladas en las fachadas.

- Seguridad estructural, acciones de edificación y

estructuras de acero. Estos tres documentos recopilan y actualizan las actuales normas al respecto. A grandes rasgos, se refieren a los cálculos de la resistencia al viento, la nieve o la sobrecarga que se deben realizar para cada tipo de construcción.

El Ministerio de Vivienda ha realizado estudios sobre el impacto de la aplicación del CTE en el precio de la edificación y de los pisos. Trujillo explicó ayer que el incremento del precio de la vivienda será de un 1% (un 0,98% para el caso de unifamiliares y un 0,70% para pisos), pero aseguró que los beneficios "económicos y sociales" que conllevará serán superiores. La ministra considera que el "esfuerzo mínimo" que supone ese incremento del precio se amortiza "en cinco años" por el ahorro energético que conlleva.

Los profesionales del sector se muestran en general muy satisfechos con la aprobación del CTE, pero los constructores dudan de que los sobrecostes sean asumidos sin problemas. El presidente de la Asociación de Promotores Constructores de España (APCE), Manuel Martí, apunta que el incremento de precios supone un obstáculo para construir viviendas de protección oficial porque los márgenes de beneficio son "más estrechos", por lo que pidió que se revise "automáticamente" el precio máximo de venta (el denominado precio básico nacional, que determina el Gobierno).

Pero lo más criticado del CTE es la carencia del documento que debe establecer las medidas para proteger los edificios del ruido, "cuando, precisamente, es una de los aspectos fundamentales de la nueva norma", según asegura Harald Aagesen, copresidente del I Congreso Nacional de Aislamiento Térmico y Acústico. También la Organización de Consumidores y Usuarios considera que ése es precisamente el aspecto que más interesa a los ciudadanos.

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