La guerrilla colombiana mata a nueve pasajeros de un autobús

La guerrilla marxista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) atacó ayer un autobús de pasajeros y mató a nueve personas. Otras 11 resultaron heridas, entre ellas una niña de nueve años. El asalto se perpetró en la carretera entre las poblaciones de Puerto Rico y El Doncello, en el departamento de Caquetá, 300 kilómetros al suroeste de Bogotá.

El autobús viajaba en una caravana protegida por el Ejército, pero se había quedado rezagado. Según la policía, las fuerzas de seguridad controlan los cascos urbanos, pero las carreteras del departamento son escenario de asaltos de las FARC, por lo que se brinda seguridad al transporte público.

Una mujer que viajaba en el autobús relató a la emisora RNC que los guerrilleros dispararon contra el vehículo, y que luego uno de ellos se subió y lo regó con gasolina para prenderle fuego, sin importarle que dentro hubiera muertos y heridos.

El jefe de la policía de Caquetá, José Ángel Mendoza, explicó que el ataque fue perpetrado por la facción Teófilo Forero de las FARC. "Inicialmente dispararon desde lejos de la carretera, a los neumáticos", dijo. Luego se acercaron y siguieron disparando, e intentaron quemar el vehículo. Siete pasajeros murieron en el asalto, y otros dos, poco después, a consecuencia de las heridas. Otros 11 han sido hospitalizados en centros de la región.

Ataques contra la población

Las FARC, que han perpetrado en el pasado brutales ataques contra la población civil, habían amenazado con impedir el tránsito de vehículos por las carreteras de Caquetá, tras declarar un "paro armado" que también afecta a los departamentos de Putumayo, fronterizo con Ecuador, y Arauca, fronterizo con Venezuela.

El ataque del sábado es el más sangriento de los últimos meses, y sucede antes de que Colombia celebre sus elecciones legislativas, previstas para marzo, y presidenciales, que arrancan en mayo. El pasado jueves, la guerrilla quemó cinco vehículos en Arauca y Santander, en medio de una ofensiva en varias zonas petroleras.

Las FARC, que agrupan a 17.000 hombres y que cuentan con la financiación del narcotráfico, mantienen además secuestradas a 58 personas, entre ellas la candidata presidencial de Los Verdes, Ingrid Betancourt, que desean canjear por 500 guerrilleros.