Merck logra otra victoria en la batalla legal de su fármaco Vioxx
El antiinflamatorio tiene 9.650 denuncias en Estados Unidos
La multinacional farmacéutica Merk se apuntó la pasada madrugada su segunda victoria legal en el marco de los procesos lanzados en Estados Unidos contra su antiinflamatorio Vioxx. El jurado federal de Nueva Orleáns consideró que su fármaco no estaba detrás de la muerte de un varón en Florida que siguió durante un mes el tratamiento contra el dolor.
La decisión supone un importante varapalo para los demandantes, que han acumulado más de 9.650 denuncias contra Merck desde que retirara el medicamento del mercado en septiembre de 2004, por los riesgos de infarto que provocaba su utilización.
El juicio se desarrolló en un primer momento en Houston (Texas) por los daños provocados en Nueva Orleáns por el huracán Katrina.
A los ocho miembros del jurado les bastaron tres horas para llegar el pasado viernes a un veredicto favorable a la farmacéutica, al considerar que no había evidencias que mostraran que Vioxx causara un incremento del riesgo de infarto en el caso de Richard Irvin, que falleció en 2001 por un fallo cardíaco a los 53 años de edad.
Merck logró una victoria similar en noviembre en Atlantic City (Nueva Jersey) y una derrota en agosto en Angleton (Tejas), donde fue condenada a pagar 211 millones de euros a la viuda de Robert Ernst. Hay unos 4.350 casos consolidados en el tribunal del distrito, que en Nueva Orleáns lleva el juez Eldon Fallon. Los abogados de los demandantes dicen que seguirán luchando por defender los derechos de otras víctimas del Vioxx, a pesar de esta nueva derrota.
Entre tanto, la compañía farmacéutica Merck mantiene que continuará la batalla legal caso por caso. En Estados Unidos, más de 20 millones de personas consumieron el antinflamatorio Vioxx durante los años en que se prescribía para dolencias como artritis. El tratamiento fue retirado del mercado hace año y medio porque su uso prolongado (más de 18 meses) elevaba el riesgo de infarto. Los abogados cambiaron de estrategia tras el juicio en Atlantic City y atacan a la compañía por haber ignorado las alertas de sus científicos.
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