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La cámara alerta de que la baja inversión educativa y el fracaso escolar lastran a las empresas

Las empresas catalanas alertan de que sufren las consecuencias del retraso endémico en el nivel de gasto en la educación no universitaria, la elevada tasa de fracaso escolar y del bajo conocimiento de idiomas extranjeros, como el inglés. Ésta es la conclusión a que llega la Cámara de Comercio de Barcelona tras realizar una encuesta a 4.000 empresas y analizar las cifras sobre la educación que ha hecho públicas la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

"La educación debe ser prioritaria. Es tan importante para las empresas como las infraestructuras", proclamó ayer el presdiente de la Cámara de Barcelona, Miquel Valls. "Hay que invertir más, pagar mejor a los profesores y profundizar en la gestión de los centros", remachó el presidente de la cámara.

Uno de los principales problemas es el fracaso escolar. Según datos de la OCDE citados en el informe de la cámara, la tasa de escolarización no obligatoria en Cataluña es del 70,7%, la segunda más baja de España, lo que, según Valls, obliga a las empresas a hacer una mayor inversión en la formación de sus empleados.

Los datos del año 2002 revelan que el gasto público en educación no universitaria alcanzó en Cataluña el 2,2% de su riqueza medida a través del producto interior bruto (PIB), frente al 3,1% en el conjunto de España y el 3,6% en la Europa de los Quince. El Departamento de Educación afirma que el gasto en educación no universitaria ha subido tres décimas en los últimos tres años y se sitúó en el 2,6% del PIB al acabar 2005.

La encuesta de la cámara evidencia que quienes se incorporan a las empresas no tienen conocimientos del mundo empresarial. A partir de las respuestas de las empresas, la cámara detecta carencias y hace propuestas para mejorar la educación no universitaria. Así, constata la falta de valores como responsabilidad, esfuerzo y constancia, y la necesidad de profesionalizar las tareas de los directores de los colegios, implantar sistemas de gestión de calidad interna en los centros, impulsar métodos para detectar el fracaso escolar y poder tutelar a los afectados, y fomentar la formación permanente del profesorado

"Sería necesario introducir algun módulo obligatorio de conocimiento general de las empresas", dijo el consejero de la cámara y presidente de Nestlé España, Josep Arcas, quien reconoció que la precariedad laboral, que en Cataluña afecta al 30% de los ocupados, puede frenar la implicación de los trabajadores en las empresas.El nivel de inglés, el idioma mayoritario en el mundo de la empresa y de la ciencia a nivel mundial, es clararemente deficiente, denunció la Cámara de Comercio de Barcelona. Sólo uno de cada cinco catalanes es capaz de expresarse en inglés. La entidad dijo que en el conjunto de la Unión Europea el porcentaje los que hablan este idioma es del 46%, según cifras de 2001, recogidas en un informe de Boston Consulting.

El objetivo debería ser, según la cámara, llegar a los niveles de inglés de los países del norte de Europa, como Suecia, donde el 88% de la población lo habla; los Países Bajos y Dinamarca (72%); Alemania (55%), y Austria (53%).

Aprovechar la televisión

Para ello aumentar el conocimiento del inglés, la cámara propone incrementar el número de horas de este idioma en los colegios y aprovechar los medios de comunicación televisivos para emitir programas en inglés para los alumnos. Las respuestas de las empresas al cuestionario de la cámara evidencian que el bajo nivel de inglés "dificulta el progreso de las empresas en un entorno global y hace perder oportunidades de negocio". Valls valoró un plan piloto que ha puesto en marcha la Generalitat para impartir más inglés en la escuela. "Este plan debe seguir con más fuerza", remachó.

Los empresarios también detectan un bajo nivel de conocimiento en matemáticas y baja competencia lingüística. Los datos del informe PISA, dados a conocer por la OCDE el año pasado, revelaron que Cataluña está por debajo de la media europea en matemáticas y lengua, aunque mejor que el conjunto de España (véase el gráfico adjunto).

Tampoco sale bien parada Cataluña en cuanto a gasto por alumno en la enseñanza no universitaria: 2.798 euros por alumno, por debajo de los 3.202 de la media española y los 5.000 de los países de la Unión Europea.

La Cámara de Comercio de Barcelona propone invertir más en el sistema educativo y no someterlo constantemente a cambios de modelo. Con respecto a la nueva ley de educación (LOE), que está en trámite en el Senado, el presidente de la entidad empresarial dijo que es una buena medida inicial para hacer frente al problema. Valls apuntó que "la falta de valores para el trabajo, como el esfuerzo, la responsabilidad, el compromiso y la autodisciplina", lleva a que una parte de los empleados tengan dificultades para asumir su papel en la empresa.

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