Rajoy: "Piqué, Acebes y Zaplana piensan exactamente lo mismo sobre el Estatuto"

Las discrepancias públicas de Josep Piqué con Ángel Acebes y Eduardo Zaplana sobre el proyecto de Estatuto catalán llegaron a tal punto que el líder del PP catalán amagó el martes por la mañana con presentar su dimisión si Mariano Rajoy no le permitía mantener un discurso diferenciado. Para evitarlo, Rajoy invitó a Piqué a su casa esa misma tarde y ambos estuvieron hablando durante más de tres horas. Según Rajoy, Piqué no le planteó "en ningún momento" que quisiera dimitir. Es más, el líder popular afirmó que "el señor Piqué, el señor Acebes y el señor Zaplana piensan exactamente lo mismo" sobre el Estatuto catalán. Y lo mismo que él. Rajoy negó así la crisis interna que sacude desde el lunes al PP.

Rajoy convocó ayer a todos los líderes regionales de su partido para decirles que el PP "no está de acuerdo con el contenido de proyecto de Estatuto catalán"; "no está de acuerdo con el procedimiento con el que se ha pactado excluyendo al PP", y "no está de acuerdo con que el sistema de financiación de todas las autonomías lo pacten entre el presidente del Gobierno y un partido de la oposición en el Parlamento catalán", es decir, CiU.

En la reunión estuvo Josep Piqué, como líder del PP catalán. Según varios de sus compañeros, éste tomó la palabra para criticar, con argumentos técnicos y políticos, el proyecto de financiación pactado entre José Luis Rodríguez Zapatero y Artur Mas en La Moncloa este fin de semana. Se da la circunstancia de que el desencadenante de la disputa fue la siguiente frase pronunciada por Piqué en una cadena de radio catalana: "De alguna manera se nos va dando la razón en muchas cosas, como es el tema de financiación". Ayer, según sus compañeros, fue muy crítico con ese acuerdo de financiación pactado en La Moncloa que, aparentemente, le gustaba el lunes.

Rajoy -que, según anunció él mismo ayer, aúna el pensamiento de Piqué, Acebes y Zaplana- censuró el acuerdo de financiación con la tesis de que no puede alcanzarse un pacto entre dos y ofrecerlo al resto como un "lo tomas o lo dejas". Apostilló que "el compromiso de ligar las inversiones públicas al PIB de cada autonomía va contra la solidaridad y hará que los ricos sean cada vez más ricos".

Polémica frase

En la reunión, según varios presidentes regionales del PP consultados, Piqué no dijo nada de su segunda frase que el lunes abonó la polémica: "El artículo 1 queda como nacionalidad, que es exactamente nuestra propuesta desde el primer día". Rajoy sí, dentro y fuera de la reunión. Mantuvo que "es inconstitucional que el preámbulo del proyecto defina a Cataluña como nación". Piqué había dicho que lo hacía de forma "alambicada". Aún más, Rajoy argumentó que esa cuestión -la definición de Cataluña como nación- es la piedra angular del rechazo rotundo del PP al proyecto de Estatuto.

Tan rotundo que él mismo recolectará, "en mesas en la calle" y en las sedes del PP, firmas para pedir que se realice un referéndum con la siguiente pregunta: "¿Considera conveniente que España siga siendo una única nación, en la que todos sus ciudadanos sean iguales en derechos, obligaciones, así como en el acceso a las prestaciones públicas?".

Rajoy no aclaró si Piqué participará también en la colecta de firmas. Sí lo hará, afirmó, el PP catalán y él mismo. Esa iniciativa fue presentada ayer en un documento titulado "Todos tenemos derecho a opinar". En todo caso, el líder del PP pidió que cuando haya dudas de interpretación de las opiniones de Piqué, Acebes o Zaplana, le pregunten a él: "Háganme caso a mí, siempre a mí". Piqué convocó anoche a su grupo parlamentario a una cena en Cataluña para exponerles cómo se ha solventado la crisis.

Rajoy eludió entrar en el debate sobre la inconstitucionalidad de intentar avalar con firmas una iniciativa contra una ley orgánica. Afirmó que la colecta busca "el apoyo político de los ciudadanos para que España siga siendo la única nación española".