La música digital amortiguó la caída de la venta de discos en 2005
Las ventas de discos descendieron durante 2005 en España por quinto año consecutivo, según los datos que ayer hizo públicos la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) en el transcurso del 40º Midem de Cannes. Los españoles adquirieron a lo largo del ejercicio recién concluido 47 millones de cedés, lo que constituye más de cuatro puntos de descenso respecto a los 49,1 millones de álbumes que se adquirieron en 2004. Con todo, el incremento en las descargas legales de música, a través de páginas web especializadas o de los teléfonos móviles ha permitido a la industria musical española, por primera vez en lo que va de siglo, cerrar la temporada con un ligero superávit respecto al ejercicio anterior.
Los 47 millones de cedés que se vendieron durante 2005 constituyen un drástico retroceso -superior al 40%- en comparación con los 78,9 millones de 2001. Desde entonces, el sector ha dibujado una pronunciada curva descendente: 65,3 millones de discos despachados a lo largo de 2002, 57,7 millones en 2003 y 49,1 millones en 2004, hasta llegar a esos 47 millones contabilizados este año pasado. Es decir, apenas un disco de media por español y año.
En compensación, los servicios de descarga digital se están consolidando y representan ya el 6% de la facturación de las discográficas españolas, según la SGAE. "Las cifras apuntan en todo el mundo a un crecimiento significativo del mundo digital. Las nuevas tecnologías no llegarán a suplir a los formatos tradicionales, pero al menos aliviarán la crisis del sector", diagnosticó desde Cannes el secretario general de la Fundación Autor, Francisco Galindo. A su juicio, "la accesibilidad a la música está llamada a primar sobre la solvencia del soporte y la reproducción. La tendencia es que nos crezcan las orejas al tiempo que nos disminuyen los oídos, puesto que las generaciones más jóvenes anteponen la cantidad a la calidad".
Discos más vendidos
El disco más demandado en España durante 2005 fue Pájaros en la cabeza, el cuarto álbum del dúo Amaral, que despachó algo menos de 350.000 ejemplares. Los tiempos en los que el álbum más vendedor del año rondaba el millón de unidades vendidas, como sucedió con el debut de Estopa, el Corazón latino, de Bisbal; El viaje de Copperpot, de La Oreja de Van Gogh, o casi todos los últimos lanzamientos de Alejandro Sanz, parecen ahora muy remotos.
Tras Amaral, en la lista anual de ventas aparecen, por este orden, Voces de ultrarumba (Estopa), Mi sangre (Juanes), Batuta latín (Batuta); Pafuera telarañas, el primer álbum de Bebe, que apareció en 2004 pero ha demostrado tener muy largo recorrido en las tiendas; Alivio de luto (Joaquín Sabina); Grandes éxitos de Mecano; las Zapatillas, de El Canto del Loco; Que el cielo espere sentao (Melendi) y, en décima posición, la edición en castellano de Fijación oral, de la colombiana Shakira.
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