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Crónica:LA CRÓNICA
Crónica
Texto informativo con interpretación

El PSPV llama a rebato

Ha sido una semana grande del socialismo valenciano, que hoy clausura su programa de fiestas con una conferencia política en la que intervendrá su secretario general, el primus inter pares, José Luis Rodríguez Zapatero, para avalar la importancia de este fasto diseñado para establecer las propuestas que se predicarán en la próxima campaña electoral autonómica. O sea, que ya estamos metidos en harina y con un ímpetu insólito por lo que a los socialistas concierne. Como era previsible, el PP ha querido epatar este protagonismo contraprogramando a toda prisa un encuentro simultáneo. Su vicio oculto parece que consiste en ejercer la oposición de la oposición, pues al fin y al cabo gobernar gobierna poco por sequía de ideas y de finanzas. Solo que en esta ocasión nos tememos que le haya salido el tiro por la culata, y a ello nos referiremos.

Antes hay que glosar el dinamismo de un PSPV resucitado que ha tenido fuelle para desarrollar sin respiro una Jornada Interparlamentaria como prólogo al evento aludido. Una sesión, ésta, organizada para recargar pilas y coordinar la ofensiva sobre los puntos débiles del adversario, decimos del PP. En algunos aspectos, no cabe duda que podrá mejorarse la acción fiscalizadora y crítica. En otros, como la actividad y eficacia parlamentaria, será difícil superar las trabas reglamentarias que condenan al limbo o al silencio tantas propuestas y preguntas incómodas para los gobernantes. Privilegios de la mayoría absoluta, reforzados ahora por el cuasi monopolio informativo de que disfruta la derecha y que lleva trazas de acentuarse. Sus señorías lo tienen difícil, pero no se les ha elegido para acomodarse a la derrota ni a la mansedumbre.

De lo que hoy se alumbre en el Palacio de Congresos ya se nos han anticipado las líneas básicas, que no obstante habrá que esperar a valorarlas en su conjunto. Por el momento, nos deja expectantes qué demonios encierra el anuncio de un modelo supramunicipal de ordenación territorial, e incluso la misma ordenación del territorio como alternativa a la vigente, intensiva y predadora. La prometida transparencia se queda en eso, en una promesa sin precedentes, aunque eufórica, tanto como el pronóstico aireado acerca de la posible victoria -por un solo diputado, que ya es afinar- de la izquierda en los comicios autonómicos. En Blanquerías, sede el PSPV, sabrán qué entrañas han escudriñado para aventurar tan pasmoso vaticinio. Claro que aún quedan muchos días para que las urnas decidan.

Llegados a este punto es casi imposible soslayar el liderazgo de Joan Ignasi Pla, reiteradamente cuestionado cuando es constatable que nadie en su partido conjetura en estos momentos su relevo. Por falta de tiempo o de candidato, pero lo cierto es que todos apuestan por su líder, quizá pensando en los comicios de 2011 y no en la cita que apremia, que también podría ser. De todos modos, y para los reticentes que aducen el carisma -o su falta- conviene recordarles que Leire Pajín o el mismísimo Francisco Camps, por no citar un florón más, tampoco andan sobrados de tal nimbo. ¡Como si el País Valenciano fuese pródigo en políticos!

Y unas palabras sobre la contraprogramación activada por el PP. Por lo pronto procede recordar que el partido de Mariano Rajoy tenía previsto para el próximo día 21 en la Feria de Muestras de Valencia un pandemónium inaugural de su campaña por la revalidación de la Generalitat. Esta plaza les es fundamental y no ha de extrañarnos que echen el resto. Como los socialistas, obviamente. Pero era el 21, y no hoy, que han improvisado este congreso sobre las infraestructuras y el agua con el fin de deslucir el desfile imprevisto de tanto ministro. El agua, esa muleta que tanto rendimiento les está dando a los populares, beneficiarios en primer lugar de la demagogia que derrochan sobre el asunto y, todo hay que decirlo, de la confusión y desarme de los socialistas en lo tocante a la defensa de su posición oficial, que es la del Gobierno central, mal vendida y peor comprendida por estos pagos.

Pero en lo que no contaba el PP es que se confirmase el informe de Van Miert y la Unión Europea, mediante una decisión en la que ha tenido arte y parte la ex ministra popular y ex comisaria Loyola de Palacio, nos ha alejado de Europa al aislar al País Valenciano de la principal red continental de transporte. Nos hemos quedado descolgados y acaso de una manera irreversible y gravosa para nuestra economía. ¿Tendrá ZP la culpa?

SUSCEPTIBILIDAD

El presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, se sintió injuriado y calumniado porque el secretario general de los socialistas valencianos le describió como defraudador. Y no lo es, por ahora al menos, pues no hay sentencia que así lo falle. Y recurrió a los tribunales, que acaban de desestimar su querella, recordándole que es un hombre público y que, como tal, ha de tener la piel más gruesa para soportar los venablos retóricos. Tanto más -pero eso no lo dice ningún juez- cuando se es titular de una biografía tan controvertida y no menos prodigiosa fortuna.

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