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Las 'pymes' sólo incluyen a mujeres en el 36% de los procesos de selección de su personal

Un estudio revela la pervivencia de estereotipos entre las pequeñas empresas andaluzas

Tereixa Constenla

Las pequeñas empresas tienen un peso capital en la economía andaluza: el 60% del crecimiento del empleo entre 1997 y 2003 descansó sobre ellas. Pero los contratos que ofrecen están bien lejos de mostrar cierta paridad. Un análisis de género encargado por la Federación Andaluza de Mujeres Empresarias muestra que la principal barrera de las mujeres para acceder a estas plantillas reside en el inicio de los procesos de contratación de personal, ya que sólo están presentes en el 36% de estos procesos. El 61% de los puestos que perciben menos de 600 euros están ocupados por mujeres en el sector.

Rosa Gómez Torralbo y Mª Ángeles Rastrollo Hornillo recibieron el encargo de la Federación Andaluza de Mujeres Empresarias de analizar la situación de las pequeñas empresas para detectar la pervivencia de barreras discriminatorias. Eficiencia en la gestión de personas e igualdad de género es el título de la publicación, financiada por la Consejería de Empleo.

La conclusión de su trabajo, realizado a partir de la investigación de 300 contratos realizados por empresas que tenían entre 6 y 50 trabajadores, muestra que la principal traba que encuentran las mujeres para incrementar su presencia entre las pymes radica en el origen mismo del proceso de selección de personal. "Lo que está pasando en las pequeñas empresas es desolador", lamenta Rastrollo, profesora titular en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Málaga.

Rastrollo, que da clases a sus alumnos sobre la gestión de los recursos humanos, observó con cierta estupefacción que en la mayoría de las pymes se realiza un proceso de gestión de personal "poco sistemático". "Se elige por cercanía y semejanza, incluso se delega esa función en otra persona", explica. En la encuesta descubrieron que el 45,7% de los procesos de selección que habían analizado se realizaban "a partir del reclutamiento de una sola persona". "Se escapa de cualquier lógica", apostilla la profesora.

Candidaturas mixtas

Las investigadoras apreciaron que las mujeres sólo habían estado presentes en el 36% de los procesos de selección de personal, mientras que los hombres figuraban en el 82% de ellos. "La principal barrera para la contratación de mujeres en las pequeñas empresas proviene de las primeras fases del proceso de selección de personal", concluyeron.

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Asimismo, observaron que cuando la selección incluía candidaturas mixtas, el resultado final arrojaba unas cifras de carácter paritario: se contrataron hombres en un 54,4% de los casos y a mujeres en el 45,6% restante.

A diferencia de los procesos de empresas mayores, que primero describen las características objetivas del puesto que desean cubrir, las pymes suelen decidir cuál es la persona ideal como paso previo. "Las barreras, aunque proceden de los estereotipos de género, no se manifiestan al final de un proceso de selección eficiente, sino que proceden de una gestión de recursos humanos escasamente planificada", esgrimen en el estudio.

A partir de una muestra, que agrupó a 7.066 personas, también constataron la existencia de desigualdades en distintos sectores, edades y niveles formativos. El perfil tipo de hombre contratado es "de mediana edad, cualquier estado civil, nivel formativo medio o bajo, sin apenas dominio de idiomas y con experiencia profesional". El perfil tipo de la mujer contratada es joven, soltera, sin hijos, con formación elevada y menor experiencia.

Los hombres ocupan categorías de todo tipo y en todos los sectores. Hay tres trabajadores contratados por cada mujer, excepto entre el personal administrativo, donde abundan las mujeres. El trabajo volvió a dejar patente la desigualdad salarial: las mujeres son el 61% de las personas que cobran menos de 600 euros y el 14,3% de las perciben más de 1.500. Las autoras alertan también sobre el techo de cristal en la micro y pequeña empresa andaluza -sólo el 21,6% de los puestos de dirección intermedia están ocupados por mujeres- y "la persistencia de estereotipos de género en la definición del perfil de competencias del puesto".

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Sobre la firma

Tereixa Constenla
Corresponsal de EL PAÍS en Portugal desde julio de 2021. En los últimos años ha sido jefa de sección en Cultura, redactora en Babelia y reportera de temas sociales en Andalucía en EL PAÍS y en el diario IDEAL. Es autora de 'Cuaderno de urgencias', un libro de amor y duelo, y 'Abril es un país', sobre la Revolución de los Claveles.

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