La plataforma contra la LOE rompe la negociación y anuncia movilizaciones

La negociaciones entre el Gobierno y las organizaciones que convocaron la manifestación contra la ley educativa están rotas sin que se haya alcanzado acuerdo alguno. La plataforma que organizó la protesta las da "por cerradas". "¿Qué más vamos a hablar? Ya no hay tiempo. No tienen voluntad de llegar a acuerdos", dijo ayer el responsable de Educación del sindicato USO, José Luis Fernández. Los convocantes acusaron al presidente Zapatero de haber "engañado a los españoles" y explicaron que el portavoz socialista en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ausentó antes de acabar la reunión el miércoles por la noche, un gesto que no les ha gustado. "Todo ha sido una estrategia", advirtieron.

Los socialistas, sin embargo, dicen que ha sido "una sorpresa" que la negociación esté rota, de la que se han enterado "por los medios de comunicación", explicó el portavoz de Educación en el Congreso, Raimundo Benzal. "De hecho quedamos en que les mandaríamos respuestas este mismo fin de semana", añadió.

"Hay una trastienda que yo no conozco pero me pregunto qué ha pasado entre anoche [por el miércoles], cuando hicieron las declaraciones al final de la reunión, y esta mañana, cuando han roto unilateralmente las conversaciones. ¿Por qué no esperaron a que les diéramos respuesta a las propuestas que nos hicieron y por qué costó tanto empezar y por qué ha costado tan poco romper unilateralmente?, insistió Rubalcaba. "Seguiremos buscando acuerdos con quienes quieran dialogar y creo que al final los habrá".

Abandono por solidaridad

Ayer mismo por la tarde se reunieron con los respresentantes del sindicato mayoritario en la concertada, FSIE, a quien sus correligionarios expulsaron de la reunión el día anterior, y con la Federación de Religiosos de la Enseñanza que, en solidaridad, se salió también de la sala. La FSIE tiene el 31,66% de representación en la escuela concertada. USO el 24%, según datos del Ministerio de Educación. La FERE es mayoritaria en la escuela concertada porque tiene la mayoría de los centros religiosos.

Ni el PP ni los convocantes creen, sin embargo, que el Gobierno tengan voluntad de acuerdo. Entienden que la reunión del miércoles con los convocantes sólo pretendía

"desactivar los efectos" de la manifestación celebrada en Madrid para pedir la retirada de la ley que reunió a unas 375.000 personas. "Vamos a seguir defendiendo una ley de calidad que iguale a todos los ciudadanos en oportunidades, porque esta ley perjudica y además a los que menos oportunidades tienen", dijo ayer el portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana. "La reunión parecía una maniobra para dilatar la negociación", criticó la representante de la patronal de colegios CECE, Isabel Bazo. "Un escenario de teatro con muy buenos actores. El Gobierno no tiene voluntad de erradicar el fracaso escolar ni de proteger los derechos constitucionales", añadió por parte de USO José Luis Fernández.

La plataforma anunció actuaciones contra la ley que no concretaron. Y aseguraron que harán "todo lo posible para que la ley no se apruebe y, si sale, para que se derogue lo antes posible". "Utilizaremos todo", dijo Bazo.

El PP, que ayer se reunió con los convocantes, "coincide con los objetivos de estas organizaciones en prácticamente su totalidad". Especialmente en que todos los alumnos estudien al menos un 65% de contenidos comunes (el 55% en las comunidades con idioma propio). Pero afirman que la redacción de ese artículo en la ley no lo garantiza. "Para que los futuros españoles tengan un sentimiento nacional común es necesario que conozcan la historia común, la geografía común, la cultura común", dijo ayer Zaplana. "También es imprescindible la libertad de los padres para elegir la educación que quieren", añadió el portavoz popular.