Planes de salida en la agenda

Un cierto optimismo se vivía ayer en Irak después de que la reunión de líderes iraquíes en El Cairo abordase abiertamente la retirada de las tropas de ocupación en ese país. No se llegó a un acuerdo sobre el calendario, pero se apuntó que ocupará buena parte de la agenda de la gran conferencia para la reconciliación que se celebrará en febrero en Bagdad. "El diálogo está abierto", declaró ayer el presidente del Parlamento iraquí, el suní Hayem al Hasani, al comentar los logros de la conferencia.

Las distintas facciones iraquíes coincidieron en la reunión celebrada en El Cairo en que la retirada ha de ser gradual, lo que, sin duda, facilita la decisión a EE UU, donde también la retirada ha comenzado a abrirse paso en el Capitolio. Ayer, el general al mando de las tropas terrestres de la coalición, el norteamericano general John Vines, se limitó a indicar que una retirada "precipitada" sería desestabilizadora para Irak.

Por su parte, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, dijo en Túnez, donde se encuentra de visita oficial, que "ya se ha decidido con los aliados" la retirada en 2006 de los 2.700 soldados italianos en Irak. Su subsecretario de Defensa Filippo Berselli señaló que la retirada podría comenzar en junio.

Mientras, el líder supremo de la Revolución Islámica, el ayatolá Alí Jamenei, dijo al presidente iraquí, Yalal Talabani, de visita en Irán, que los iraquíes deben de presionar a EE UU para que haga público un calendario de retirada de todas las tropas extranjeras en Irak.