El coste de la jubilación
El Gobierno ha presentado a empresarios y sindicatos su propuesta general de reforma del sistema de la Seguridad Social, una pretensión largamente acariciada por los gobiernos españoles pero que plantea graves dificultades de aplicación. La propuesta está orientada por el principio de conseguir que los trabajadores tengan una vida laboral más prolongada, atrasando la edad de jubilación, de forma que coticen durante más tiempo a la Seguridad Social. El documento enviado a la patronal y los sindicatos recomienda que la edad mínima para la jubilación anticipada se amplíe a 61 años -actualmente son 60-, estímulos económicos para que los trabajadores sigan en el empleo después de los 65 años y nuevos coeficientes reductores por cada año que falta para cumplir los 65 para cuantificar la pensión. En la misma línea, establece el Ministerio de Trabajo que sólo se podrá percibir el 100% de la pensión cuando se haya cotizado durante 35 años.
El documento tiene imprecisiones, pero es un punto de partida para un debate a fondo sobre el sistema español de pensiones. La orientación es correcta: los trabajadores se incorporan cada vez más tarde al mercado de trabajo y la esperanza de vida es cada vez mayor. El resultado es que el coste de las pensiones es cada vez más elevado y ha de pagarse durante más tiempo. La solución lógica es prolongar en lo posible la vida laboral, sin imposiciones no pactadas, y ajustar de manera más estricta las pensiones percibidas a las aportaciones realizadas. Y eso es precisamente lo que, en términos generales, propone el Gobierno.
No es un problema acuciante. La entrada de inmigrantes -uno de cada 10 cotizantes- alivia por el momento, con mayores ingresos, la presión sobre los costes del sistema. Pero es prudente elaborar las ideas mediante un debate público que alumbre las correcciones posibles para acompasar la edad de jubilación con la esperanza de vida. Mejor ahora, cuando es posible un debate sin agobios económicos, que cuando aumente la presión de los costes sobre el sistema.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.