La Unión Europea reclama a Turquía que adapte sus leyes a los derechos humanos

La Comisión Europea advirtió ayer a Turquía de que el ritmo de reformas realizadas para incorporarse a la Unión Europea "se había ralentizado durante 2005". En su informe anual, Bruselas reconoce los esfuerzos realizados por las autoridades de Ankara, pero les recuerda que deben intensificar sus acciones para adaptar su legislación a las normas comunitarias, especialmente en el campo de "los derechos humanos".

El comisario para la Ampliación, Olli Rehn, destacó en una conferencia de prensa los ámbitos en los que Turquía tiene que realizar un esfuerzo especial a corto plazo (uno o dos años) para que las negociaciones de adhesión iniciadas el pasado 3 de octubre prosperen debidamente. Rehn hizo especial hincapié en "la lucha contra la tortura y los malos tratos, unas prácticas que se han reducido pero que todavía existen", según sus informes. El comisario apremió a los gobernantes turcos a que "intensifiquen sus esfuerzos para que los autores de estas prácticas no permanezcan impunes y sean castigados".

Las otras advertencias exhortaban a Ankara a realizar más esfuerzos para defender la libertad de expresión de "las personas que se expresan de manera no violenta". Sobre este punto el informe denuncia la persecución sufrida por el novelista Orhan Pamuk, por unas declaraciones a un periódico suizo sobre las matanzas de armenios y kurdos en Turquía.

La Comisión recomendó también al Consejo de la Unión Europea la candidatura de Macedonia para iniciar negociaciones de adhesión, pero sin fijar fecha.