PP y PSOE mantienen el pacto del Estatut y no aceptarán enmiendas sobre la lengua y el 5%

Populares y socialistas presentaron ayer, por separado, un total de 16 enmiendas consensuadas para reformar el Estatut en la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados. El acuerdo entre los dos partidos incluye la negativa a aceptar modificaciones del resto de grupos parlamentarios sobre la denominación del valenciano y la barrera electoral del 5%. Cinco de los seis grupos minoritarios del Congreso presentaron precisamente ayer una enmienda conjunta en la que reclaman que se reconozca la unidad lingüística del valenciano y el catalán en el Estatut.

El plazo para presentar enmiendas a la reforma del Estatuto valenciano se cerró ayer a las 20.00 con el pacto entre populares y socialistas ratificado. Ambos grupos presentaron finalmente 16 enmiendas parciales, de las cuales sólo tres tienen calado político y el resto corresponden a mejoras técnicas y delimitación de competencias. Las modificaciones más importantes se producen en tres cuestiones: la recuperación de los derechos históricos, que se limitan y se recuperan a partir de la Constitución de 1978 y no por la derogación del Decreto de Nueva Planta de 1707 "para evitar ambigüedades interpretativas en la recuperación y actualización del derecho civil valenciano"; la competencia en materia de justicia, que se recorta, de modo que la capacidad de la Generalitat para crear secciones o juzgados en la Comunidad Valenciana estará "en coherencia con la ley orgánica del Poder Judicial"; y el referéndum previsto para ratificar futuras reformas del Estatut, que "podrá no convocarse en aquellos casos en que la reforma sólo implique ampliación de competencias".

El secretario general del PSPV, Joan Ignasi Pla, reconoció que las posibilidades de modificar la introducción de la expresión "idioma valenciano" en la reforma del Estatut son prácticamente nulas. Pla indicó que la posición de su partido respecto al valenciano está "muy claramente definida" en el texto presentado en el Congreso y reiteró su voluntad de defender el valenciano. "Lo que tenemos que hacer, fundamentalmente, es que la promoción del valenciano sea cada día mayor y que su uso social sea cada día mayor", sentenció. Para el PSPV, la inclusión en el Estatut de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, que ya ha dictaminado sobre la unidad lingüística del valenciano y el catalán, es garantía suficiente.

El portavoz del PP en las Cortes Valencianas, Serafín Castellano, insistió en la sintonía entre su partido y el socialista y reiteró que las enmiendas pactadas tienen un carácter preventivo frente a otras reformas estatutarias como la catalana. "No hemos pedido nunca ningún derecho histórico, ninguna competencia, ni la recuperación de ninguna institución que tuviéramos antes y que la Constitución no nos pueda otorgar", manifestó.

La ratificación del pacto entre los dos partidos mayoritarios deja reducidas al mínimo las posibilidades de que la Comisión Constitucional del Congreso apruebe alguna de las otras enmiendas presentadas por el resto de grupos. Isaura Navarro (Esquerra Unida), Agustí Cerdà (ERC) y Jordi Xuclà (CiU) presentaron una enmienda conjunta firmada por cinco de los seis grupos minoritarios del Congreso en la que piden el reconocimiento de la unidad lingüística del valenciano y el catalán. Navarro, cuyo grupo Izquierda Verde ha presentado finalmente 29 enmiendas al Estatut, aseguró que una ley orgánica como la que se tramita no se puede convertir en "un panfleto donde puedes decir lo que te dé la gana", sino que debe reconocer la realidad científica y estar en consonancia con las resoluciones aprobadas por el Congreso de los Diputados. El convergente Jordi Xuclà, cuyo grupo sólo enmendará la cuestión del valenciano y la barrera electoral del 5%, pidió "coraje" a los socialistas para no convertirse en una "coartada" del PP en sus planteamientos perversos. Xuclà se mostró dispuesto incluso a proponer una enmienda de reciprocidad en la reforma del Estatuto catalán para que allí se reconozca la denominación de valenciano. El republicano Agustí Cerdà, cuyo grupo presentó cerca de 60 enmiendas, justificó la enmienda sobre la unidad lingüística por la necesidad de no mantener vivo un conflicto que ha estado vigente en los últimos 20 años.Un centenar de intelectuales, artistas y profesionales valencianos remitieron ayer una carta al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la que realizan una reflexión sobre los déficits de la reforma del Estatut. El presidente de Valencians pel Canvi, Francesc de P. Burguera, la entidad que ha impulsado la iniciativa, entregó el escrito al delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé.

En la carta remitida a Zapatero, los firmantes expresan su preocupación por la "involución de determinados aspectos que a la larga se pueden traducir en un aumento de la crispación social y en graves carencias que harán difícil un completo funcionamiento democrático de la política valenciana". Entre las cuestiones mencionadas figura la barrera electoral del 5%, calificada de "excluyente", y que en opinión de los firmantes dota al País Valenciano del sistema electoral "menos representativo del Estado español" que atenta contra el pluralismo político. El texto también reclama que no se "criminalice" la denominación País Valenciano y muestra su preocupación por la confusión que puede provocar sobre la naturaleza de la lengua la reiterada referencia a "idioma valenciano".

Entre los firmantes de la misiva figuran dos ex rectores de la Universitat de València, escritores, actores, profesores universitarios y periodistas como Joan Francesc Mira, Ramon Lapiedra, Rosa Serrano, Vicent Alonso, Pedro Ruiz, Joan Sifre, Vicent Esteve, Emili Tortosa, Joan Ramon Peris o Josep Piera hasta alcanzar el centenar de firmas. En el texto remitido al jefe del Gobierno se advierte de que el contenido "no pretende ser una condena al nuevo proyecto de Estatut elaborado por los partidos mayoritarios".

La carta promovida por Valencians pel Canvi coincidió ayer con el final del plazo para presentar las enmiendas a la reforma que se discutirán en la Comisión Constitucional del Congreso. El grupo que más enmiendas, cerca de 70, ha presentado ha sido el de ERC. Su diputado Agustí Cerdà explicó que el elevado número de modificaciones propuestas se justifica en que se reclaman para el País Valenciano las mismas competencias que para Cataluña.

IU-IV ha registrado un total de 29 enmiendas. Un número inferior al centenar que presentó Esquerra Unida en las Cortes Valencianas. La diputada Isaura Navarro argumentó que se han reducido a las cuestiones fundamentales para facilitar el acuerdo con los partidos mayoritarios, a la vez que se han mantenido las defendidas por la plataforma Compromís per l'Estatut.

El Bloque Nacionalista Galego, que se ha hecho eco de las peticiones del Bloc Nacionalista Valencià que lidera Enric Morera, presentó ayer un total de 25 enmiendas, entre las que destaca una referida al sistema de financiación similar a un concierto económico con el Estado. CiU optó por reducir al mínimo las modificaciones presentadas al Estatut y se ha limitado a presentar cuatro enmiendas referidas a la rebaja de la barrera electoral del 5% y la unidad lingüística del valenciano y el catalán.

Por su parte, el Partido Nacionalista Vasco presentó sólo tres enmiendas. Ninguna coincide con el resto de grupos. Una de ellas reclama la supresión de la denominada cláusula Camps por "incongruente" y las otras dos piden la supresión de la disposición adicional que hace referencia a la derogación del Decreto de Nueva Planta de 1707 y la recuperación del derecho foral valenciano y el cambio de la expresión "Derecho foral valenciano" por "derecho civil consuetudinario valenciano".