Un 'kamikaze' provoca la semiamputación de un brazo a otro conductor

Un conductor de nacionalidad ecuatoriana, identificado por la Guardia Civil como Diego Javier Vilara Barajas, de 23 años, condujo en la madrugada de ayer durante casi 13 kilómetros en sentido contrario por la autovía de Extremadura (A-5). Su recorrido comenzó en la zona comercial de Xanadú, en Arroyomolinos, y terminó tras chocar con otros dos vehículos a la altura de Alcorcón. Uno de los automovilistas involucrado en el siniestro, Manuel Rodríguez, de 51 años, sufrió la semiamputación del brazo izquierdo, según un portavoz de Emergencias 112.

Vilara conducía una furgoneta Citroën Jumpy, de color blanco, con matrícula 8889 CDM. Según fuentes de la Dirección General de Tráfico (DGT), comenzó a circular en sentido a Madrid por los carriles de salida de la capital, a la altura de la zona comercial de Xanadú.

El conductor comenzó a las 2.08 su erróneo recorrido. A partir de esa hora, el teléfono de emergencias 112 recibió en apenas 10 minutos 27 llamadas de otros automovilistas que, presas del pánico, lograron esquivar al supuesto kamikaze. Los comunicantes llamaban alarmados por lo que les acababa de ocurrir.

La Guardia Civil de Tráfico fue alertada de inmediato. Unos 20 minutos más tarde y ya en el término municipal de Alcorcón, el presunto conductor homicida provocó un accidente doble. Primero se topó con un Opel Astra que circulaba correctamente. Su conductor, cuyo nombre corresponde a las iniciales C. E. J. G., de 36 años, pegó un volantazo a la altura del kilómetro 13,200, lo que le hizo salirse de la carretera por el margen derecho de la misma, según la DGT.

Amasijo de hierros

La Citroën Jumpy, dotada con una caja isotermo para el traslado de productos congelados, siguió rodando, aunque unos 200 metros después chocó contra un Ford Focus con matrícula 7431 DPF. En su interior viajaba el vecino de Alcorcón Manuel Rodríguez Rodríguez. Como consecuencia del accidente, el turismo volcó. Al lugar acudieron dos dotaciones de los bomberos de Alcorcón, que tuvieron que rescatar a la víctima del amasijo de hierros en que quedó convertido el vehículo en el que viajaba.

Los facultativos del Summa que atendieron a la víctima le apreciaron una semiamputación por encima del codo en el brazo izquierdo. Tras estabilizar a la víctima, fue trasladada a la Fundación Hospital Alcorcón, al igual que el conductor de la furgoneta. Éste sufría un traumatismo abdominal, del que fue dado de alta ayer por la mañana. Fuentes de la investigación señalaron que el supuesto kamikaze olía a alcohol. Muestras de sangre del supuesto infractor han sido enviados al Instituto Nacional de Toxicología para que sea éste el que determine si conducía bajo los efectos de bebidas alcohólicas.

El vecino de Alcorcón fue intervenido a mediodía de ayer en el hospital y en principio los médicos no creen que vaya a perder el brazo izquierdo. Padecerá las consecuencias del fuerte golpe, ya que es posible que no pueda realizar algunos movimientos. Ayer por la tarde fue trasladado a una habitación y los facultativos esperan su evolución en las próximas 48 horas. La víctima reside en el barrio del Parque de Lisboa, a donde se dirigía cuando se estrelló contra el supuesto kamikaze.