Andalucía recuerda que pagarlo todo sería injusto

A la espera de conocer "por escrito" la propuesta del Gobierno, la consejera andaluza de Salud, María Jesús Montero, recibió ayer con satisfacción las líneas básicas de la oferta del Gobierno, consistente en aportar una "cantidad extraordinaria" a los Presupuestos Generales del Estado para financiación sanitaria que "no significa poner los contadores a cero". Esto, según Montero, resultaría "injusto", porque "penalizaría a las comunidades que gestionaron bien".

Andalucía no es de las comunidades peor paradas en cuanto a déficit sanitario. Según datos de 2003, ascendió a 627 millones de euros. Por esta razón, la Junta defiende que el nuevo modelo de financiación sanitaria tenga en cuenta la población atendida como criterio básico.

A propósito de los 3.000 millones de euros fijados por el Gobierno como aportación extraordinaria (al alimón con las comunidades) en cuatro años, la consejera andaluza reclamó al Ejecutivo "el mayor esfuerzo posible hasta que se apruebe la capacidad normativa" de las autonomías. Montero explicó que "el aumento de la capacidad normativa tiene que garantizar que el sistema sea sostenible en el futuro".

La Junta andaluza es partidaria de que se recurra a los impuestos indirectos como el alcohol y el tabaco, que tienen una incidencia más negativa sobre la salud, pero también cita otras opciones, como el IVA.

Coalición Canaria (CC), que gobierna en su comunidad, eludió pronunciarse ayer sobre la oferta. "Nos parece muy extraño que aún no dispongamos de una propuesta formal, a pocos días de la Conferencia de Presidentes autonómicos, a no ser que exista y no se nos haya transmitido", manifestó José Miguel Barragán, secretario de Organización de CC.

Barragán aseguró no entender por qué el Gobierno estatal no hace suyas las conclusiones del estudio elaborado por la Comisión de Política Fiscal y Financiera.