El Ayuntamiento derribará 'quarts de casa' de la Barceloneta para instalar ascensores

El Ayuntamiento de Barcelona afrontará el año que viene la instalación de ascensores en los quarts de casa de la Barceloneta, que son bloques de pisos de unos 30 metros cuadrados. Dadas estas dimensiones, la intervención supondrá el derribo de uno de cada seis de estos edificios. El concejal de Ciutat Vella, Carles Martí, explicó que el proyecto se aprobará tras consultar a los vecinos en septiembre y se prevé ejecutar la primera fase en 2006. El Ayuntamiento aún no sabe a cuántas familias afectará esta tanda, pero no serán más de 200, que es el número de pisos disponibles para los realojamientos.

La adecuación de las 5.000 viviendas de la Barceloneta ha sido hasta ahora la asignatura pendiente de la reforma del barrio, que arrancó con la aprobación del Plan Especial de Reforma Integral de 1985 y la posterior declaración de la zona como Área de Reforma Integral. Las dimensiones de los llamados quarts de casa, de entre 28 y 35 metros cuadrados, hacen compleja cualquier intervención para rehabilitarlas e instalar ascensores.

Los quarts de casa son el resultado de las sucesivas particiones de la casa de mig del siglo XVIII. Estas casas, de unos 65 metros cuadrados, fueron concebidas como viviendas bajas -a la manera de las unifamiliares- y se dispusieron en grupos de ocho. En el siglo XIX se troceó la planta de estas casitas, de aquí el nombre de quarts de casa. Y de forma paralela, han crecido verticalmente hasta alcanzar cuatro y cinco plantas.

La intervención en estos bloques será gradual. "Se agruparán de seis en seis, se sacrificará uno y se arreglará el conjunto del edificio. Lo primero será mejorar la accesibilidad de las casas con ascensores, puesto que la mayoría de los vecinos son mayores", explicó Martí. Aún no se conocen sus magnitudes ni por dónde se empezará, pero en todo caso la primera tanda sólo abarcará 200 viviendas, que es el número de las disponibles para realojar a las familias afectadas. Todos los pisos protegidos están en el solar que ocupó la estación de Cercanías de Renfe.

Los vecinos del barrio han comunicado su inquietud al Ayuntamiento. "Si nos consultan en septiembre, no tendremos ni un mes de margen para actuar", aseguró la presidenta de los vecinos, Emília Llorca. Los vecinos quieren saber qué viviendas están afectadas y conocer más detalles, y el Ayuntamiento insiste en que aún es un anteproyecto y en septiembre se informará a los vecinos. Otra complicación es la financiación del proyecto. Todavía no hay presupuesto, pero el consistorio tratará de "estimular" las aportaciones privadas.El Ayuntamiento de Barcelona espera que, como en el barrio de Santa Caterina, el nuevo mercado sea uno de los revulsivos para revitalizar la Barceloneta. El proyecto de este equipamiento está sobre la mesa desde 2001, pero fue ayer cuando el concejal de Comercio y presidente del Instituto Municipal de Mercados, Jordi Portabella, anunció que los tenderos que ahora están en una carpa provisional de la plaza del Poeta Boscà podrán trasladarse al nuevo mercado en marzo de 2007.

El nuevo edificio está firmado por el arquitecto Josep Mias, que trabajó con el desaparecido Enric Miralles. El proyecto, que tiene un coste de 6,2 millones de euros, prevé conservar la estructura de hierro que levantó el arquitecto Antoni Roviera i Trias en 1884 y combinarla con un diseño innovador que conectará con la plaza a través de una pérgola.

"Es el mercado que realiza un volumen más alto de recogida selectiva de basura, por lo que potenciaremos esta actitud con la instalación de 180 paneles solares que generarán una energía de 30 kilovatios por hora", explicó Portabella.

Como ha sucedido en Santa Caterina, con la reforma del mercado son muchos los comerciantes que se quedarán por el camino. Si en las instalaciones antiguas había unos 70 tenderos, las nuevas albergarán a 39. El edificio también incorporará un supermercado de 500 metros cuadrados y dispondrá de 600 metros cuadrados más para restaurantes.

Portabella explicó que ya se han empezado a construir las dos plantas de aparcamiento subterráneo, lo cual es complejo porque está "muy cerca de las aguas freáticas y del mar". En breve arrancará la reforma de la plaza del mercado, con un coste de unos 800.000 euros, según Portabella.