El presidente de Confebask apuesta por recuperar el diálogo social

El nuevo presidente de Confebask, Miguel Lazpiur, se ha marcado como prioridad la recuperación del diálogo social, que calificó de "roto". "Estamos en momentos bajos", dijo al referirse a las relaciones laborales en Euskadi. Lazpiur expresó ayer al empresariado vasco, en la reunión anual del Consejo General de la confederación patronal, la necesidad de modernizar el clima laboral. "Hay que pacificar nuestras relaciones laborales, renovándolas y fortaleciéndolas", dijo.

El empresario guipuzcoano, vicepresidente hasta ahora de Adegi, tomó posesión de su cargo en Bilbao. Sustituye al alavés Román Knörr, que ha estado seis años al frente del organismo que agrupa a más de 13.000 empresas vascas y es miembro de pleno derecho de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) desde 1988.

Miguel Lazpiur, que recordó su procedencia de una empresa "familiar, pequeña", aseguró que, junto a la recuperación de diálogo social, su prioridad será la paz. "Necesitamos", dijo, "la ausencia total de violencia de cualquier tipo, intimidación y extorsión". Acto seguido señaló que Euskadi vive ahora un periodo "todavía difuso de manifestaciones en torno a la paz" y que "nada nos gustaría más que alcanzar la paz y la normalidad y estabilidad en nuestra sociedad". Sobre los empresarios amenazados apuntó que su "único consejo" es que "continúen en sus puestos de trabajo". El nuevo presidente fue elegido por unanimidad y en el consejo no salieron las voces críticas contra el proceso de su designación.El presidente saliente, Román Knorr, aseguró que la última polémica en el seno de Confebask "no se había tratado" en la reunión de ayer, aunque agregó que "todo es planteable". El presidente de la patronal vizcaína (Cebek), José María Vázquez Eguskiza, cambió hace dos semanas las críticas expresadas desde ella y la alavesa SEA por el procedimiento seguido por Adegi para proponer a Lazpiur, por un cuestionamiento de fondo a la dimensión y protagonismo que ha tomado Confebask. Apostó por "reconducir estructural y operativamente" la patronal vasca para adecuarla "al proyecto original". A su juicio, Confebask debe recortar su papel en favor de las organizaciones provinciales y limitarse a ser una "oficina de representación en temas" que las patronales territoriales consideran "comunes".

El nuevo presidente se mostró comedido sobre el planteamiento de Vázquez Eguskiza. "Acabo de aterrizar", se excusó y valoró que su opinión en este asunto "tampoco cuenta demasiado", ya que es el comité ejecutivo el que debe adoptar la decisión de un cambio de ese calado. Pero sí manifestó que, tras lo que calificó de buena labor del equipo de dirección saliente, apuesta "por una línea continuista" y, por tanto, sin modificaciones en la estructura y funcionamiento de la patronal vasca.

'Plan Ibarretxe'

En esa línea, anticipó que seguirá el proyecto liderado por Knörr, cuya labor tachó de "extraordinaria". Pero se mostró evasivo sobre su postura ante el plan Ibarretxe, que provocó la última gran crisis en la patronal hace casi tres años, cuando se descalificó el proyecto y luego se optó por el silencio político tras las presiones del PNV. El nuevo presidente aseguró que el comité ejecutivo de Confebask ya se pronunció "en su día". "Yo ahí no tengo nada que objetar. Además, hay que tener en cuenta que seguirá adoptando posturas en función de los problemas a los que se tenga que enfrentar. Eso puede o no gustar, pero es así", agregó.

Lazpiur, a quien se considera próximo al PNV, aunque sin un perfil político, pretende permanecer sólo tres años en el cargo y rechaza un segundo periodo, como ha sido habitual en Confebask. Una de sus empresas, en Bergara, fue objetivo de un atentado de ETA el pasado 15 de mayo por no pagar la extorsión terrorista, pero la banda se equivocó colocó el explosivo en una factoría ubicada justo al lado, como luego reconocería en un comunicado emitido el 17 de junio. La designación de Lazpiur como presidente de Confebask se difundió apenas diez días antes del ataque.

En su intervención de ayer señaló como "problemas claves" de las empresas vascas la innovación y la formación, debido a la "nueva competencia" de los países del Este europeo. "Necesitamos un sistema formativo, desde la formación reglada hasta la ocupacional, que nos acompañe".En un anticipo de lo que será su línea de trabajo, Lazpiur expresó su gusto por la labor en equipo. "No creo en los atajos", dijo.

Román Knörr tuvo en su discurso de despedida un especial recuerdo para José María Korta, el presidente de la patronal guipuzcoana asesinado por ETA hace cinco años, y expresó su sensación de que durante su mandato la patronal vasca ha avanzado "en la dirección correcta". Tras estos seis años, Confebask es, dijo, una organización "muy implicada con su entorno", se ha mejorado la competitividad de las empresas y se ha contribuido al desarrollo socioeconómico del País Vasco. Afirmó que las últimas elecciones autonómicas dejaron un "mensaje muy claro" de intensificar el diálogo. "Hay que lograr consensos entre todos los partidos democráticos, buscar lo que nos une y no ahondar en lo que separa en esta sociedad que es plural", concluyó.

Miguel Lazpiur, nacido en Bergara en 1942, fundó en 1960 junto a su padre un taller dedicado al mecanizado de piezas. Ahora es un grupo industrial con 180 trabajadores, socio de la multinacional británica GKN. El nuevo líder de Confebask ha patentado varias máquinas de su invención, la primera en 1963, cuando realizaba el servicio militar.