Las autonomías del PP se niegan a subir sus impuestos para pagar la Sanidad

Mariano Rajoy, líder del PP, reunió ayer a los presidentes de las comunidades autónomas gobernadas por su partido para decidir conjuntamente que todas ellas se negarán a subir sus impuestos como parte de la solución para financiar el déficit sanitario. Todos los presidentes de las autonomías gobernadas por el PP y de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla acudieron a una reunión en la que la dirección popular estuvo representada, además de por Rajoy, por su secretario general, Ángel Acebes, su portavoz en el Congreso, Eduardo Zaplana, y la secretaria de Política Autonómica y Local, Soraya Sáenz de Santamaría. Con estas presencias, Rajoy enviaba, de paso, un mensaje de respaldo público a Acebes y Zaplana ante los barones del PP.

La reunión de Rajoy con sus presidentes autonómicos había sido convocada tras el anuncio del Gobierno de convocar, para finales de este mes, una reunión de la Conferencia de Presidentes para tratar la financiación de la Sanidad. Esa reunión ha quedado aplazada a septiembre, pero el Ejecutivo adelantó que la solución al déficit sanitario debería incluir una subida de los impuestos cedidos a las autonomías.

Las del PP anunciaron ayer que no subirán, en ningún caso, sus impuestos. Aún más, algunas, como la Comunidad de Madrid, han anunciado rebajas en esos impuestos propios.

Las autonomías del PP afirman que el Estado "tiene a su disposición medios suficientes para abordar los gastos sanitarios sin recurrir al bolsillo de los españoles aumentando los impuestos". Tras su reunión con Rajoy, Acebes y Zaplana criticaron el "incumplimiento del sistema de financiación autonómica vigente". Según los presidentes autonómicos del PP, ese sistema de financiación, junto a la Ley de Cohesión Sanitaria, "tiene mecanismos para dotar de más fondos a las autonomías por los aumentos de la población" que "permanecen inéditos por decisión de este Ejecutivo".

"Peajes políticos"

La subida de impuestos que ha sugerido el Ejecutivo fue descalificada por estos presidentes populares con el argumento de que, con ella, el Gobierno "pretende pagar sus peajes políticos a sus socios nacionalistas".

La Conferencia de Presidentes se reunirá, en principio, en la primera semana de septiembre. Los presidentes del PP critican que, antes de ese foro, el Gobierno no haya sometido a discusión, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), el nuevo modelo de financiación. "El retraso de la Conferencia de Presidentes demuestra la incapacidad del presidente del Gobierno de fijar una propuesta que satisfaga a Pasqual Maragall y a Josep Lluís Carod Rovira, y llevarla a discusión al CPFF, que es donde debe debatirse y aprobarse", aseguró ayer Soraya Sáenz de Santamaría, responsable autonómica del PP.