Valencia busca su estrategia

Valencia busca una estrategia de futuro, saber hacia dónde se dirigirá a partir de 2008, cómo aprovechará sus ventajas y compensará sus deficiencias. Los ejes básicos del desarrollo de la ciudad hasta 2015 se plasmarán en comisiones de trabajo que toman cuerpo lentamente tras una primera conferencia de "exploración" con el fin de recoger propuestas de instituciones, universidades, empresas y particulares. El Centro de Estrategias y Desarrollo de Valencia (CEyD), creado para este fin por el Ayuntamiento, del PP, presentó ayer los seis ejes de trabajo principales que a partir de septiembre se deberán concretar en proyectos y líneas de actuación, según explicó el concejal de Innovación, Juan Eduardo Santón. Cada área trabajará en una comisión integrada por las instituciones y sectores afectados, con la perspectiva de involucrar a más participantes -en total un millar de personas-, porque al final "una institución sola puede hacer muy poco", recalcó Santón.

Según el primer eje de análisis propuesto por el CEyD, el más definido, Valencia debe convertirse en "un centro direccional del Mediterráneo", en un nudo de comunicaciones en el que son "fundamentales" el desarrollo del puerto -el "megaport"-, la ampliación del aeropuerto y las líneas del AVE, tanto con Madrid y Lisboa como hacia Barcelona y Francia. Objetivos que "deben conseguirse en un plazo relativamente breve" si la ciudad no quiere perder posiciones "que luego costará remontar", subrayó Santón. Potenciar el turismo de negocio y cultural, y el de cruceros, será otro de los temas que debatirá esta comisión estratégica.

Valencia también aspira a ser "una ciudad avanzada de la economía del conocimiento", en la aplicación y difusión de las nuevas tecnologías, en el impulso a la innovación e investigación, y la atracción de empresas de servicios avanzados. Para Santón, la ciudad tiene un "potencial tremendo" para los proyectos vinculados a las ciencias de la salud con nuevos institutos científicos.

Otros dos grandes ejes de trabajo se centrarán en la educación y la cultura en un sentido amplio que abarca desde estrategias de aprovechamiento del tiempo y el ocio, el impulso "del aprendizaje constante" o la revitalización del patrimonio, hasta la pretensión de convertir la ciudad en un referente europeo de las artes escénicas. A ello se une la idea de dinamizar la actividad en los barrios, la participación de los vecinos y los proyectos de integración. Todo ello en una ciudad "de desarrollo urbano integrador" y sostenible, bien conectada con su área metropolitana y abierta al mar, objetivos que perfilará otra de las comisiones. Finalmente, el CEyD quiere plasmar en el plan una gestión común y participativa como base de una nueva forma de gobernar y acentuar la visión metropolitana del análisis, como han pedido diferentes instituciones.

La traducción de estas estrategias en una ciudad moderna, con calidad de vida y diversa exigirá de partida una amplia cooperación social e institucional, y también unos presupuestos que compartan el coste de los proyectos.