Un centenar de fotógrafos miran la ciudad y sus gentes

El VIII Festival Internacional de Fotografía y Artes Visuales PHotoEspaña (www.phedigital.com, hasta el 17 de julio) ofrece un programa de un centenar de fotógrafos de 20 países que se reparten en 52 exposiciones en centros y galerías del eje de la Castellana de Madrid sobre el tema de la ciudad contemporánea. La apertura oficial se celebró ayer en el Jardín Botánico, con asistencia de la infanta Elena a las propuestas de Stan Douglas y Stephen Gill. En esta edición participan William Klein, que recibirá un homenaje, Bernd y Hilla Becher, Keith Haring, Walter Rosenblum, Óscar Mariné y Martin Parr.

La inauguración oficial del certamen se centró en la visión de Stan Douglas (Vancouver, Canadá, 1960) sobre la decadencia de Detroit y de Stephen Gill (Bristol, Reino Unido, 1971) con dos series sobre comportamientos en la ciudad. Las exposiciones fueron recorridas por los duques de Lugo y representantes de patrocinadores institucionales, como el Ministerio de Cultura, la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid.

Hay un nuevo auge del documental, "con la eficacia de un novelista del siglo XIX"

En fechas anteriores se abrieron otras muestras de Walter Rosenblum, Bill Owens y Stephen Shore, en el Centro Cultural de la Villa; de Gabriel Cualladó, en la Fundación Astroc; una extensión a Toledo (museo de San Tacruz, con Donovan Wylie y Art Chantry) y una colectiva sobre los nuevos lenguajes documentales en España y Portugal, en el Conde Duque; en otras galerías se han presentado David Goldblatt, Chema Madoz, James Casabere, Yaël Davids, Montserrat Soto y Eduardo Momeñe. Hoy seguirán las presentaciones, con las ciudades de William Klein, en el Conde Duque (se pasarán sus películas en la Filmoteca Española) y una colectiva sobre la casa, en el Círculo de Bellas Artes, con imágenes de Martin Parr, David Spero, Guy Tillim, Miguel Trillo y otros. En los próximos días se completará el programa con obras de los Becher, Naia del Castillo, Ricky Dávila, Priscila Monge, proyecciones nocturnas, talleres y clases magistrales.

El entorno mediterráneo en la evolución de la ciudad contemporánea es el proyecto comisariado por Oliva María Rubio, que han desarrollado en la Fundación Canal (Mateo Inurria, 2) el colectivo Fotoleve, formado por los arquitectos Eva Serrats y José González. Con el título de Otros mediterráneos se proyecta en pantallas un viaje por la cultura urbana de Barcelona, Marsella, Venecia, Atenas, Estambul y Beirut, a los que se ha unido la serie Madriterráneos, de Carma Casulá, en torno a la construcción de la identidad en habitantes de la ciudad.

Otras ciudades ocupan las salas de Casa de América (paseo de Recoletos, 2), con las fotos y documentales del diseñador Óscar Mariné en una instalación sobre la experiencia personal en la ciudad de Buenos Aires. Completan los espacios dos series de Fernell Franco sobre las elegantes pandillas en barrios de Cali y las mercancías amarradas, y la propuesta espacial de Diego Barajas en torno a la movilidad global en un urbanismo de ficción.

La memoria urbana de Keith Haring se conserva en los documentos que conserva la fundación que lleva el nombre del artista fallecido en 1990 y que se exponen en la Fundación ICO (Zorrilla, 3). Las fotografías y vídeos documentan la realización de grafitos durante 10 años en numerosas ciudades, entre ellas Madrid y Barcelona, que han desaparecido. "Haring sabía que la fotografía era su inmortalidad", declaró Julia Gruen, su asistente.

La evolución de la ciudad y sus gentes es el tema de este año de PHotoEspaña, propuesto por su comisario general, Horacio Fernández, que ve en las imágenes de Stan Douglas y Stephen Gill el cambio de modelo de ciudad en el siglo XX y los comportamientos en la experiencia urbana contemporánea que puede ser compartida.

En los trabajos de los fotógrafos observa "un nuevo auge del documental, con una lectura más compleja y fragmentaria", que se aleja de las "imágenes cerradas y heroicas" de los cincuenta (Robert Capa). "El artista no pretende hacer expresividad, no introduce su opinión". Es el llamado documental conceptual, pero el comisario prefiere destacar el trabajo literario, "con la eficacia de un novelista del siglo XIX", como hace Douglas sobre el sueño y la pesadilla de Detroit.