Zapatero asegura a la ejecutiva del PSOE que no existe ninguna negociación con ETA

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero afirmó ayer ante la Ejecutiva Federal del PSOE que no ha recibido ofertas de ETA ni hay contactos con la banda terrorista, y advirtió a los suyos de que se preparen para todo tipo de especulaciones sobre un eventual proceso de fin del terrorismo a la vista de lo que ya aparece "cuando todavía no hay nada". Zapatero reafirmó su voluntad de intentar que el terrorismo sea desterrado de este país. "Es el deber democrático de todo Gobierno", señaló. Los miembros de la ejecutiva le ofrecieron todo su apoyo para que intente cumplir ese objetivo.

Por primera vez, la ejecutiva del PSOE escuchaba de su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, una valoración sobre el posible proceso de diálogo con la banda terrorista si ETA abandona las armas, después de que el Congreso aprobara una resolución en este sentido. Zapatero señaló que estaba dispuesto a emprender esta tarea porque ese es "el deber democrático de todo presidente del Gobierno". "Es mi obligación buscar mecanismos para conseguir la paz", aseguran que dijo en esta reunión interna. Además, añadió, que lo quiere "la mayoría del Parlamento y de los ciudadanos".

Algunos miembros de la ejecutiva quisieron saber ayer si existía una "oferta de ETA" al Gobierno. Zapatero señaló que no existe nada concreto. Esta consideración venía a cuento por las especulaciones desatadas sobre una oferta de ETA al presidente del Gobierno, tras el encuentro celebrado el sábado por la tarde en un domicilio privado entre Zapatero y el filósofo Fernando Savater, a iniciativa de aquel. Savater, en unas declaraciones recogidas ayer en Abc señalaba lo siguiente; "Zapatero me dijo que recibió una oferta de ETA para dejar las armas sin letra pequeña y sin contrapartidas políticas, con la única condición de que se dé salida a los terroristas presos".

Diversos mensajes

El filósofo precisó ayer esta información a través de una nota en la que asegura que el presidente no le había hablado de "ninguna oferta concreta" de ETA; que lo único que había era lo ya conocido, "los diversos mensajes que por distintos conductos proceden del entorno etarra".

Las únicas señales que los socialistas tienen en cuenta para valorar la actual situación de ETA son las siguientes:

-Agosto de 2004. Carta de Francisco Múgica, Pakito, uno de los líderes más importantes de ETA, a los militantes: "Esta lucha armada que desarrollamos hoy en día no sirve. Esto es morir a fuego lento. No se puede hacer una lucha armada a base de comunicados y de proferir amenazas que luego no se cumplen. No se puede desarrollar una lucha armada cuando se es tan vulnerable a la represión. La capacidad de disuasión de los términos aducidos es nula. Nuestro capital político está ahí. Explotémoslo en todas sus virtualidades: lucha institucional y lucha de masas".

-Noviembre de 2004. Mitin de Batasuna en San Sebastián. Arnaldo Otegi propone resolver el "conflicto vasco" por vías políticas y aboga por participar en una reforma con los partidos vascos, sean nacionalistas o no.

-Enero de 2005. Batasuna, en una carta a Zapatero, le pide un diálogo con ETA para resolver el problema de los presos y confirma que Batasuna se incorporaría a la reforma estatutaria en Euskadi.

Zapatero pidió ayer a los miembros de su ejecutiva que evitaran comentarios y consideraciones que pudieran inducir a la confusión. De la reunión salió el respaldo absoluto al presidente del Gobierno para que condujera el proceso como estimara conveniente porque "él tenía los datos", según señaló, entre otros, el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra. También brindaron el apoyo expreso el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, el responsable de Política Autonómica, Alfonso Perales, la presidenta del Parlamento andaluz, María del Mar Moreno y las responsables de Política Social y Desarrollo Rural, Matilde Valentín y Soraya Rodríguez.

La división de las víctimas del terrorismo y la manifestación que se celebrará el 4 de junio en Madrid fue comentada con preocupación por algunos miembros de la ejecutiva. Zapatero zanjó la cuestión señalando que el PSOE y el Gobierno están y estarán siempre con las víctimas.

El responsable de Organización del PSOE, José Blanco, se refirió tras la reunión "al radicalismo y extremismo" del líder del PP, Mariano Rajoy, que llena su discurso de "injurias". "Los hechos son que se siguen deteniendo etarras y que a la banda sólo le queda anunciar el abandono de las armas o la cárcel".

La manifestación del 4 de junio en Madrid fue también objeto del encuentro de Zapatero y Savater. Según la información publicada por Abc, el filósofo vasco manifestó que la manifestación convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo y respaldada por el PP es "absurda. No viene a cuento liarse a palos con el presidente del Gobierno cuando [...] estoy seguro de que [Aznar] habría dado saltos de alegría" ante "una oportunidad como ésta".