España es el país industrializado donde más aumentan las emisiones de CO2

Las emisiones de gases de efecto invernadero en España han aumentado un 45,61% (en 2004) respecto a 1990, sobrepasando en más de 30 puntos el nivel máximo (15% en 2008-2012) permitido por el Protocolo de Kioto, de cambio climático. Las cifras, presentadas ayer por WorldWatch y Comisiones Obreras, indican que España es el país industrializado donde más han aumentado las emisiones. La tendencia es aún más preocupante, ya que en 2005, de continuar la tendencia del primer trimestre, se habrá llegado al 50% de incremento.

Las emisiones de gases de efecto invernadero subieron en España un 3,55% el año pasado, incremento superior al registrado en 2003, según los resultados presentados por Joaquín Nieto (secretario confederal de Medio Ambiente y Salud de CC OO) y José Santamarta (WorldWatch), aplicando los datos y metodologías oficiales para realizar estos inventarios. "2004 fue un mal año hidráulico, la producción hidroeléctrica fue un 23% inferior a la de 2003 y, consecuentemente, las centrales de ciclo combinado de gas natural y las de carbón funcionaron más horas", explicaron.

"Con los últimos datos oficiales del Ministerio de Industria, el aumento registrado en realidad es ya de un 46%", dijo Santamarta. En cuanto a este año, los indicadores "van francamente mal", comentó, ya que la producción hidroeléctrica es, en el primer trimestre, un 40% inferior a la de 2004".

De los 15 de la Unión Europea que acordaron el reparto de responsabilidades para contener las emisiones y cumplir con el Protocolo de Kioto, España es el que más se aleja de su objetivo. Bajo ese compromiso internacional, que este año ha entrado en vigor, la media comunitaria de emisiones debe ser en 2008-2012 un 8% inferior al nivel de 1990; a España se le permite aumentar las suyas hasta un 15%.

El Protocolo abarca seis gases de efecto invernadero, pero su contabilidad se realiza traduciéndolos a CO2 equivalente. España emitió el año pasado 14.600 toneladas más de CO2 equivalente que en 2003, con un total bruto de 416.561 toneladas. "Con el escenario actual y siendo realista es difícil que no rebasemos el 50%", señaló Santamarta.

El Gobierno elaboró el año pasado un Plan Nacional de Asignación (PNA) de emisiones, obligado por una directiva comunitaria, que abarca seis sectores económicos. Según ese plan, las emisiones españolas deben crecer hasta un 24% en 2008-2012 respecto a 1990, y se estima que, entre otras medidas, para cumplir con el máximo del 15%, tendrá que adquirir unos 20 millones de toneladas de CO2 equivalente anuales durante cinco años a quien le sobren cupos de emisión. Pero Santamarta apuntó que, de seguir la tendencia actual, habrá que comprar cinco veces más, es decir unos 100 millones de toneladas al año.

Las cifras presentadas por CC OO y WorldWatch (todos los años las dos organizaciones avanzan esta información, que posteriormente se presenta oficialmente con resultados prácticamente idénticos) indican que el mayor responsable del conjunto de las emisiones españolas (un 77,9% del total) es el sector energético, que registra en 2004 un incremento del 51% respecto a 1990. La agricultura y la ganadería, con un 11% del total, ha registrado ya un aumento del 20% sobre el año base (1990); los procesos industriales representan el 8% del total de emisiones y han crecido un 18% y las del sector de residuos (un 2,9% del total) han aumentado un 65%.

Grave herencia

Nieto y Santamarta recordaron ayer que los Gobiernos del Partido Popular "dejaron una grave herencia que sin duda ha dificultado la elaboración del PNA, y dificultará el propio cumplimiento de las obligaciones españolas dentro de la Unión Europea: además, no elaboraron ningún plan para cumplir los compromisos adquiridos al firmar y ratificar el Protocolo de Kioto". Con el cambio de Gobierno, señaló Santamarta, "se han acometido acciones importantes, como el PNA, un buen plan en las circunstancias que tenemos, pero las medidas son todavía insuficientes".

En los sectores no afectados por este plan, incluido el transporte, "no se ha hecho prácticamente nada, y el tiempo corre", dijo Nieto. Este especialista destacó también algunas iniciativas positivas tomadas este año, como la creación de la red iberoamericana de oficinas de cambio climático o los contactos con América Latina y el Magreb para la puesta en marcha de proyectos conjuntos que reviertan positivamente en el balance de las emisiones españolas al aplicar los mecanismos contemplados en el Protocolo de Kioto.