_
_
_
_
_

El calzado carece de un plan global para atajar la crisis, según un estudio

El informe rechaza que las importaciones chinas sean la única causa de la recesión

Un informe sobre el sector del calzado realizado por la Universidad de Alicante revela que la industria carece de una estrategia global para superar la crisis. El estudio es un encargo de los ayuntamientos del Vinalopó, tras la quema de dos naves de fabricantes chinos en el polígono de Carrús, en Elche, el pasado septiembre. El incidente dejó al descubierto la magnitud de la crisis del sector, que cerró 2004 con un descenso del 14% de las exportaciones y un aumento del 45% de las importaciones. El informe rechaza que la competencia China sea la clave de la recesión.

Los economistas piden más presión inspectora para aflorar la mano de obra clandestina

El informe sobre el sector del calzado en la Comunidad Valenciana ha sido elaborado por un grupo multidisciplinar de profesores de la Universidad de Alicante. El trabajo, titulado El calzado en el Vinalopó, entre la continuidad y la ruptura, responde a un encargo de los ayuntamientos de Elche y Petrer, dentro del Proyecto Advise (Agrupación de Desarrollo del Vinalopó para el sostenimiento del Empleo), en el marco de una iniciativa europea. La publicación analiza el sector del calzado en las comarcas de Elche y Elda-Petrer, donde se concentra prácticamente el 80% de la producción en España.

El estudio concluye que no se están adoptando medidas que puedan ayudar a resolver la crisis del sector de una manera global. Las únicas propuestas "bien encaminadas" son fruto de la iniciativa individual, pero "insuficientes" porque las causas de la crisis son estructurales. Ello quiere decir, según apunta la publicación, que para superar esta etapa es necesario modificar la industria desde dentro, en conjunto.

El profesor Josep-Antoni Ybarra, profesor de Economía Aplicada de la Universidad de Alicante y uno de los especialistas que ha participado en la elaboración de informe, resalta la envergadura del problema de crisis del calzado: "Estamos hablando de la ruptura de un sector que ha sido muy vertebrador de la sociedad del bienestar en esta zona", asegura Ybarra.

La investigación abarca varios apartados que van desde el análisis global del sector, a otros aspectos como la economía sumergida, los inmigrantes, la opinión de los fabricantes y alternativas para superar la crisis. En el apartado de la economía sumergida, el informe evidencia que en Elche el 80% o de la fuerza del trabajo dedicada a las tareas de aparado y cortado es clandestina.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El profesor Ybarra destaca que la crisis del sector calzado es estructural y en cambio, "las salidas que se están adoptando son de carácter individual, hay quien percibe la crisis de manera directa y quien, como puede, trata de sobrevivir". Los empresarios, para este experto, "no piensan en que son ellos los que deben provocar los cambios, insisten en culpar de la crisis a la paridad euro-dólar y en la rigidez del mercado". Sin embargo, según este profesor de Economía Aplicada "no hay mercado más flexible que el calzado y además llevan décadas eludiendo las normativas".

El economista rechaza imputar a la denominada competencia amarilla [los frabicantes chinos] todos los males del sector. "Los chinos están importando calzado porque la ley lo permite, es cierto que en algunos casos se están incumpliendo normativas pero los zapateros locales que llevan sorteando la ley muchos años, no pueden ahora acusar de ser los responsables de su crisis a los fabricantes chinos".

El profesor Ybarra subraya que las iniciativas para superar la crisis pasan por mejorar y consolidar los canales de distribución, introducir cambios en las materias primas, "en definitiva, ser más competitivos, a base de productos de calidad y diferenciados".

En cuanto al empleo sumergido, el estudio insta a la Administración a incrementar la actividad inspectora y fomentar el asociacionismo entre este colectivos de operarios, mayoritariamente mujeres, las llamadas aparadoras. El informe también llama la atención a las organizaciones sindicales para que se impliquen de una manera más activa para hacer aflorar esa mano de obra oculta mediante contratos en el régimen especial.

El vaticinio del informe sobre el futuro del sector no es halagüeño: "Es un sector desprestigiado, nadie quiere estar en él porque carece de perspectivas de futuro. Ningún joven desea entrar, por tanto, sus expectivas son cuanto menos inquietantes", argumenta Ybarra.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_