Osakidetza afronta hoy su primera huelga general en plena campaña electoral

Osakidetza afronta hoy, en el ecuador de la campaña para las elecciones del 17 de abril, la primera jornada de huelga general que se convoca en la sanidad pública vasca. En sus 22 años de historia, el Servicio Vasco de Salud no había tenido que hacer frente a una convocatoria de paro de este nivel, que, sin embargo, llega en plena división sindical. Respaldan la convocatoria las centrales ELA, SATSE (enfermería) y el Sindicato Médico, que suman la mayoría sindical en la mesa de negociación con un 80%. Comisiones Obreras, UGT y LAB se han desmarcado e incluso han firmado con la dirección de Osakidetza un acuerdo sobre las condiciones de trabajo para este año.

Las protestas y movilizaciones que se han registrado hasta ahora en la sanidad pública se habían reducido a determinados colectivos, pero en esta ocasión es todo el personal sanitario y administrativo el que está llamado a la huelga. En total, 25.000 personas entre trabajadores de plantilla, interinos y sustitutos. El paro pondrá fin a la serie de huelgas comarcales que los tres sindicatos iniciaron el pasado 17 de febrero. Sin embargo, no se trata de un punto final. ELA, SATSE y Sindicato Médico han anunciado que desde mañana abren un compás de espera hasta la formación del nuevo Gobierno vasco tras las elecciones. "El próximo consejero de Sanidad va a tener encima de su mesa el conflicto nada más tomar posesión de su cargo", advirtió ayer Encarnación de la Maza, representante del SATSE.

Los servicios mínimos establecidos para la jornada de hoy son los mismos que han venido rigiendo los paros parciales: en los hospitales se habilitará el personal que trabaja en un día festivo para atender las urgencias y a los enfermos ingresados. Los centros de atención primaria contarán con los mismos trabajadores que en un sábado, pero sólo para atender urgencias y entre nueve de la mañana y dos de la tarde.

Las centrales convocantes de la huelga esperan un "importante" respaldo. Izaskun Garikano, de ELA, resaltó ayer: "Los trabajadores no dan por cerrada la negociación, pero la Administración debe saber que si hemos tenido que llegar a convocar los paros es porque no ofrece soluciones para evitar el deterioro de las condiciones de trabajo y del sistema sanitario". ELA, SATSE y el Sindicato Médico han cifrado en un 70% el seguimiento de los paros parciales por parte del personal de atención primaria y en un 65% en los hospitales. Con estos datos, la convocatoria de hoy podría paralizar el sistema sanitario, pero la dirección de Osakidetza ofrece cifras muy diferentes.

La directora de Recursos Humanos del Servicio Vasco de Salud, María Jesús Múgica, precisó ayer que una vez finalizadas las jornadas de huelga por comarcas los preceptivos descuentos en nómina se han realizado sólo a 2.086 trabajadores, menos del 9% de la plantilla estructural, compuesta por 22.416 empleados. La suma del dinero descontado asciende a 195.672 euros. "Todos y cada uno de los paros parciales han sido un fracaso desde la perspectiva de movilizar a los trabajadores", indicó. Múgica calificó de "huelga política" la convocatoria de hoy, ya que, en su opinión, los sindicatos adelantaron la jornada, prevista inicialmente para el 22 de abril, para hacerse notar en plena campaña electoral. "La puerta de Osakidetza siempre estará abierta para negociar, pero las centrales prefieren hacer una campaña mediática", agregó.

Desde los sindicatos la visión es distinta. La representante del SATSE asegura que Osakidetza dio por cerrada la negociación cuando firmó el acuerdo con la minoría de LAB, CCOO y UGT. Sobre ese pacto, que recoge una batería de propuestas para mejorar las condiciones laborales, los convocantes del paro resaltan que éstas no entran en el fondo de la cuestión y son superficiales.