Las diferencias entre ricos y pobres han crecido en Alemania con Schröder

La difusión de los datos del informe sobre la pobreza en Alemania proporciona a la oposición más munición contra el Gobierno: durante los años de gobierno de la coalición de centroizquierda, entre 1998 y 2003, aumentaron en Alemania las diferencias entre ricos y pobres y el porcentaje de personas que cae bajo lo que se considera umbral de pobreza.

A mediados de la legislatura, el Gobierno presenta desde el año 2001 un informe sobre la pobreza y la riqueza en Alemania. La definición de pobreza es un criterio muy relativo. Lo que en Alemania se define como pobreza sería una situación envidiable en gran número de países del mundo. Se considera umbral de pobreza, según un criterio de la UE, los ingresos por debajo del 60% de la media. Esto se cifra en Alemania en unos ingresos de 938 euros al mes. Por debajo se considera entrar en el riesgo de pobreza. El porcentaje de personas en riesgo de pobreza aumentó bajo el Gobierno SPD-Verdes del 12,1% en 1998 al 13,5% en 2003. El Gobierno atribuye este incremento al paro y al bajo crecimiento de la economía. La oposición acusa al Gobierno de fracaso.

Pone de manifiesto el informe que la cuota de pobreza afecta en especial a los parados, a los emigrantes y a las madres o padres solteros con hijos. El informe saca a relucir también que las diferencias entre ricos y pobres han aumentado en Alemania con el gobierno SPD-Verdes. El patrimonio acumulado en los hogares alemanes aumentó en ese mismo periodo y alcanza la suma de cinco billones de euros. Esta suma fabulosa repartida de forma equitativa entre todos los hogares dejaría un patrimonio de 133.000 euros en cada casa. No obstante, el reparto se aleja mucho de esa cifra ideal. El 50% de la población más pobre sólo dispone de algo menos del 4% del total. El 10% de los hogares más ricos poseen casi el 47%, y este porcentaje creció dos puntos desde el año 1998 cuando el SPD y Los Verdes llegaron al poder.

Los dos dirigentes de la oposición democristiana, la presidenta de la CDU, Angela Merkel, y el de la CSU, el primer ministro de Baviera, Edmund Stoiber, escribieron una carta al canciller federal, el socialdemócrata Gerhard Schröder (SPD), con la propuesta de un pacto para Alemania, un programa de 10 puntos para combatir el paro, que en enero alcanzó los 5,2 millones, el 12,6% de la población activa. Desde Yemen, en plena gira por Oriente Próximo, Schröder respondió con una larga misiva a los dirigentes de la oposición. El canciller se declara dispuesto a "aceptar una propuesta seria de diálogo".