Industriales y viticultores acuerdan salidas para la crisis del vino

Industriales en el sector del vino, junto con el conjunto de las organizaciones agrarias y las cooperativas, cerrarán hoy el acuerdo por el que se trata de buscar salida a la actual crisis de bajos precios y hundimiento de ventas en el sector. Entre otras medidas, se constituirá una comisión interprofesional, desde la que se hará un seguimiento permanente del sector, y se buscarán salidas para los excedentes.

La cotización del vino atraviesa por muy malos momentos. Los precios en el mercado oscilan en este momento en el entorno de 1,80 euros-hectogrado para el vino blanco, lo que equivale a una liquidación de la uva a sólo 0,12 euros. El objetivo de ambas partes es lograr un equilibrio en el mercado, que suponga además soluciones de futuro para todo el sector.

Para Manuel Sánchez Brunete, representante de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (Coag) y presidente del Comité consultivo del vino en la Unión Europea, al margen del peso de los acuerdos, lo importante en este momento para el sector es que, por primera vez, las asociaciones de industriales -Avimes y Federación del Vino- junto con toda la producción han puesto las bases para una colaboración futura en defensa de este producto.

El compromiso entre ambas partes no contempla, en ningún caso, acuerdos en materia de precios, ya que ello iría en contra de las reglas de juego de la Competencia. Sin embargo, sí han asumido una serie de cuestiones para buscar una mejor articulación de los mercados y, sobre todo, para encontrar salidas a una oferta excedentaria en aumento.

Industriales y productores constituirán una comisión interprofesional desde la que se hará un seguimiento permanente sobre el comportamiento del sector. Entre otras medidas, se contempla solicitar en los próximos meses una destilación de crisis o quema de vino de entre 4 y 4,5 millones de hectolitros, con una ayuda complementaria oficial hasta lograr una liquidación de 1,80 euros hectogrado. Desde la parte industrial, su colaboración para apoyar un mejor funcionamiento del mercado se quiere rentabilizar recabando el apoyo del sector productor para la puesta en marcha de una nueva normativa por la que se reconozca la categoría de Vinos de la Tierra de España.

Vino de la Tierra

Los industriales mantienen esta petición desde hace varios años con el rechazo o la oposición de una parte del sector productor y de la propia Administración central. En este momento, hay coincidencias entre la producción y las industrias para reconocer la necesidad de aumentar las ventas de vino en el mercado interior y en el exterior. Desde esta perspectiva, el Vino de la Tierra de España se contempla como una posibilidad para vender más, pero también como un riesgo si no hay un riguroso control sobre la calidad de esos caldos. Por este motivo, en esa batalla por los vinos de la tierra, el punto central para su autorización serán los mecanismos de control de la producción.

Objetivo de industriales y agricultores es que el mercado del vino avance por la estabilidad en los precios. En esta línea, ambas partes se comprometen a un seguimiento de las previsiones de cosecha para la próxima campaña.