El cine español vuelve al desierto en la segunda edición de Fisahara

El cine vuelve al desierto. La primera semana de marzo, en los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf, al suroeste de Argelia, se celebrará la segunda edición del Festival Internacional de Cine del Sáhara (Fisahara), cuya primera se llevó a cabo en el campamento de Smara en noviembre de 2003. Esta vez será en el campamento cercano de Auser, pues la intención es que el festival tenga un carácter itinerante entre los cuatro grandes campamentos donde se concentra la mayoría del exilio saharaui que espera el regreso al Sáhara Occidental, el antiguo Sáhara español, ocupado ilegalmente, según las resoluciones de la ONU, por Marruecos desde 1975.

El cineasta peruano Javier Corcuera, director de Fisahara, presentó ayer en el cine Doré, sede de la Filmoteca Nacional, la lista de 17 películas, subtituladas en árabe, que podrán verse esos días en la noche del desierto. Bajo un techo de estrellas, se proyectarán en mitad de la nada en una gran pantalla cintas como El milagro de Candeal, Mar adentro, Poniente, La rosa del desierto o La gran aventura de Mortadelo y Filemón. La solidaridad con la causa saharaui es el objetivo principal de Fisahara, por eso no tiene carácter competitivo aunque al final, como el año pasado, un jurado compuesto exclusivamente por refugiados decida qué películas merecen unas simbólicas Rosas del desierto, esas pequeñas y humildes cristalizaciones de cuarzo que la erosión otorga formas caprichosas y que en mitad del Sáhara adquieren categoría de piedras preciosas.

Acompañaron a Corcuera la directora Icíar Bollaín, que proyectará Flores de otro mundo, y la actriz Lola Dueñas, una de las protagonistas de Mar adentro. La presidenta de la Academia Española del Cine, la actriz Mercedes Sampietro, quiso también apoyar el festival, y recalcó que lo hacía a título personal.