El Gobierno de Perú sortea los votos de censura por la asonada militar

El Gobierno peruano, presidido por Alejandro Toledo, logró sortear ayer las mociones de censura planteadas contra el jefe del Gabinete, Carlos Ferrero, y el ministro de Defensa, Roberto Chiabra, a raíz de la asonada militar del pasado 1 de enero en la localidad de Andahuaylas, que se saldó con seis muertos. A pesar de que la oposición no logró su objetivo, insistió en que aumentará la presión para que Toledo haga cambios en su Gabinete.

Aunque el Gobierno del presidente Toledo haya salido airoso de las mociones de censura, que ayer no alcanzaron los 61 de los 120 votos necesarios para prosperar, no cabe duda de que su situación es muy frágil. Para Toledo, últimamente se encienden luces rojas por donde mire. La oposición, encabezada por Unidad Nacional y el Partido Aprista del ex presidente Alan García, está ejerciendo una fuerte presión sobre el jefe del Ejecutivo para que haga importantes reformas en el equipo de Gobierno. El partido de Gobierno (Perú Posible) se defiende alegando que los opositores lo único que quieren es una tajada de poder.

Mientras los políticos se pelean, las encuestas señalan que la popularidad de Toledo está bajo mínimos y que aún puede caer más bajo. El año comenzó para el presidente con la toma de una comisaría por parte de 160 militares encabezados por el ex mayor del Ejército Antauro Humala en la localidad andina de Andahuay-las, al sur del país. Exigían la renuncia del presidente y aunque no lo lograron, la asonada acabó con seis muertos, decenas de heridos y varios detenidos. A pesar de que la rebelión parecía no tener ni pies ni cabeza, llamó la atención el apoyo popular que lograron Humala y sus hombres.

Tras la asonada, cuya víctima política hasta el momento ha sido sólo el ministro del Interior, Javier Reátegui; saltó el escándalo que involucra a la hermana del presidente. Margarita Toledo está siendo investigada por haber sido el cerebro de la operación de falsificación de las firmas con las que el partido País Posible (actualmente Perú Posible) inscribió la candidatura de Toledo. "Entre 1996 y 1999 se falsificaron las firmas, pero en 2004 se cometieron nuevos fraudes para encubrir el anterior", dice el portavoz de Unidad Nacional, Xavier Barrón. "Toledo está entre la espada y la pared, sería terco y ciego si no hiciese algo, algún cambio en su Gabinete, después de todos estos escándalos, independientemente del resultado de la moción de censura. La situación es ingobernable, parecida a la de Argentina con De la Rúa o Bolivia con Sánchez de Losada. Y ya sabemos qué pasó allí. Los peruanos piden a gritos un cambio", explica Barrón.

"Lo que quiere la oposición es una tajada del poder", contraataca Manuel Bermúdez, portavoz del partido gobernante en el Congreso. "Unidad Nacional busca poner uno de sus hombres como premier [jefe de Gabinete de ministros] para conseguir objetivos partidistas, por eso no dudo que insistirá en sus ataques al Gobierno", explica Bermúdez. El partido de Unidad Nacional propuso a Luis Bedoya Reyes, un abogado y político reconocido, para ocupar ese cargo. No obstante, el Gobierno cree que la oposición quiere poner a Bedoya Reyes y utilizar su prestigio como pantalla para otros fines. Barrón sostiene que la propuesta de Bedoya Reyes fue mal interpretada y sea quien sea, Ferrero está "acabado y debe salir del Gobierno".