La tecnología acaba con los campos de desguaces de coches

Si es difícil ver un campo de vacas, también se está poniendo fin al decrépito paisaje de campos abonados con coches esqueléticos. En Valdizarbe, en Puente la Reina (Navarra), lo más extraño es que no hay coches herrumbrosos.

Este desguazador, fundado en 1983, ha instalado lo último en informática y tecnología para reciclar todo lo que se pueda de los vehículos. "Lo hicimos un poco por ideología y otro poco por obligación", explica Efrén Goñí, director técnico de la empresa. "Por ideología, porque las cosas hay que hacerlas así; y por obligación porque había una normativa, que se iba retrasando, que obliga a una serie de medidas para todas las empresas de desguace, y que por fin se va a aplicar".

Con la nueva legislación europea, el automóvil no es sólo un medio de transporte. Es también un "vehículo peligroso". Una bomba de contaminación que no puede dejarse abandonada en medio del campo. "Antes el negocio del desguazador era dejar los coches en la campa y el que quisiera una pieza, que la arrancara de algún coche", explica Goñi. Hoy, en Recuperaciones Valdizarbe, el que quiere una pieza la busca en Internet y luego, si está, tendrá su etiqueta y estará colocada en su estante y sección correspondiente, como si fuera un artículo de El Corte Inglés. "En la base de datos tenemos unas 120 piezas de automóvil, pero al multiplicarse por marcas, modelos y versiones de coches, llegaremos a unas 20.000 referencias".

La aplicación informática ha costado cerca de un millón de euros, que, por supuesto, no ha podido costear este taller ni ninguno del sector. El programa es resultado de la colaboración de la Asociación Española de Desguazadores y Reciclaje del Automóvil (AEDRA) con el BBVA, H-P, Microsoft y Telefónica.

La normativa europea sobre tratamiento de vehículos fuera de uso ha acelerado el cierre de muchos de estos negocios, algunos ilegales. Por eso a Valdizarbe han llegado este año el triple de coches, unos 1.500. "A partir de ahí empieza nuestro trabajo. La toma de datos del vehículo, con su antigüedad, kilometraje, y sobre todo las piezas aprovechables; luego el coche se coloca en estanterías. Cuando le llega el turno pasa a la nave de descontaminación. Le quitamos los tres tipos de aceite y los líquidos. Después, los sólidos".

Los empleados (la empresa cuenta con 17) cogen la ficha del vehículo y así saben qué pieza aprovechable tienen que extraer. Desde la web de la asociación AEDRA, todos los desguazadores de toda España tienen acceso al banco de datos de todos. En el caso de Valdizarbe, también el internauta puede ver si en su taller está la pieza que le interesa. Es su segunda fuente de ingresos.

La primera es la chatarra. "Cuando hemos desguazado seis o siete vehículos avisamos para que se los lleven. Gracias a que el precio ha subido, compensamos los gastos del desguace con este dinero", porque del resto, la mayoría son gastos. "No pagamos para que se lleven los aceites, pero sí por los otros líquidos y por los neumáticos. A partir de 2007, el fabricante tendrá que pagar el coste de la retirada", recuerda Goñi. "Entonces se cumplirá la máxima de que quien contamina, paga".

VALDIZARBE: www.valdizarbe.es