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El pago de un euro por visita aportaría 32 millones anuales a la sanidad pública

El cálculo incluye las visitas a los especialistas y a los médicos de asistencia primaria

Miquel Noguer

La comisión de expertos que asesora al Gobierno catalán para reducir el déficit de la sanidad pública tiene sobre la mesa un documento que cifra en 32 millones de euros los ingresos anuales que generaría el pago de un euro por visita médica en caso de aplicarse esta propuesta. El documento, elaborado por la patronal Unión Catalana de Hospitales, defiende que todos los pacientes, a excepción de los enfermos crónicos, paguen un euro por visita, tanto para el médico de asistencia primaria como para los especialistas.

La comisión de expertos no se ha pronunciado sobre la idoneidad o no de recomendar al Gobierno catalán que aplique este canon, pero el presidente del grupo de trabajo, Miquel Vilardell, aseguró a este diario que las cifras aportadas por la patronal hospitalaria "son fruto de un esmerado cálculo". Añadió, sin embargo, que el texto es "uno más" de los que barajan los expertos, que emitirán un dictamen en enero.

De los 32 millones que se recaudarían en caso de cobrarse el euro por visita, 21 procederían de la atención primaria y 10 de la atención especializada. El déficit acumulado de la sanidad pública catalana ronda los 2.200 millones de euros. Hasta el año 2003 se incrementó a un ritmo de entre 600 y 900 millones, lo cual ha encendido todas las alarmas del Gobierno catalán y le ha llevado a pedir al Ejecutivo central que revise por completo el sistema de financiación de la sanidad.

El gerente de la Unión Catalana de Hospitales, Boi Ruiz, considera que las propuestas del documento responden a la voluntad de mejorar un sistema de financiación y una sanidad que "se está resintiendo de la falta de toma de decisiones".

Sin entrar a analizar la idoneidad del pago de un euro, Vilardell considera que los 32 millones anuales harían variar poco el déficit sanitario, pues esa cifra apenas representa el 5% del déficit anual. En cambio, sí reconoce que la medida podría disuadir a personas que hacen un uso indiscriminado de los servicios sanitarios.La Unión Catalana también plantea introducir un canon en los servicios de urgencias, donde los pacientes pagarían un euro para las visitas que no acabaran en ingreso. Por este concepto podrían recaudarse otros 3,1 millones de euros anuales.

Otras propuestas afectarían a los hospitales. La más controvertida sería que los pacientes pagaran la materia prima de los menús hospitalarios que no tengan carácter terapéutico. Con una estimación de tres euros al día, el sistema ingresaría 9,1 millones de euros anuales. La patronal de los hospitales catalanes también apoya la idea de que la Generalitat aplique un gravamen sobre el alcohol y el tabaco y otro sobre las matriculaciones de vehículos para sufragar la sanidad pública.

Las reformas también podrían alcanzar al gasto farmacéutico. La patronal hospitalaria sostiene que carece de sentido que fármacos que los pacientes de atención primaria deben pagar en la farmacia les sean dispensados gratuitamente cuando están ingresados en un hospital. En caso de que se cobraran estos fármacos, las arcas públicas ingresarían otros 11,7 millones de euros.

Boi Ruiz mantiene que estas cifras representan "simples propuestas" para dar elementos de juicio a los responsables del Departamento de Salud.

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Sobre la firma

Miquel Noguer
Es director de la edición Cataluña de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona, ha trabajado en la redacción de Barcelona en Sociedad y Política, posición desde la que ha cubierto buena parte de los acontecimientos del proceso soberanista.

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