_
_
_
_
LOS HOGARES ESPAÑOLES

Casi el 40% de los españoles de 25 a 34 años sigue viviendo en casa de sus padres

La vivienda cara y la precariedad laboral retrasan la emancipación y dificultan la natalidad

Los hijos abandonan la casa paterna cada vez más tarde, y, además, aumentan los que prolongan la estancia en ella. Casi cuatro de cada 10 personas entre 25 y 34 años (el 37,7% de las de esa edad) viven en el domicilio de sus padres. Así lo revelan los últimos datos del censo de 2001 pendientes de conocer, difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Una década atrás, cuando se realizó el censo de 1991, el 28,7% de los ciudadanos de esa edad convivían con sus progenitores (1.711.831).

En 10 años, la proporción de personas a caballo entre la veintena y la treintena que permanecen en el hogar paterno ha aumentado un 51,2%. De los casi siete millones de habitantes entre 25 y 34 años, 2.587.867 continúan en casa de sus progenitores, según el INE. Esta pauta es más frecuente entre los hijos que entre las hijas: el 43,5% de los varones y el 31,7% de las mujeres en ese tramo de edad conviven con sus padres.

Más información
Hogares pequeños y parejas de hecho
El 40% se casa con un convecino
Cerca de tres millones de personas viven solas, casi el doble que en 1991
Los divorcios provocan un aumento del número de madres solas con hijos
Las familias numerosas son un 41,7% menos en diez años
La ONU constata una fuerte caída de la natalidad en el mundo

El retraso en la emancipación tiene consecuencias en aspectos como la natalidad, explica la demógrafa Margarita Delgado, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). "Esa demora supone un retraso en el comienzo de la convivencia de pareja. Esto incide directísimamente en el número de hijos que se tienen, porque cuanto más se tarda en procrear, menos posibilidades hay de tener niños, debido al calendario biológico", detalla. Esta experta añade la edad de emancipación en España es una de las más altas de la Unión Europea. En paralelo, la fecundidad es de las más bajas (1,3 hijos por mujer en edad fértil en 2003).

Delgado destaca como causas de la emancipación tardía "el empleo precario y la dificultad para acceder a una vivienda, dado su alto coste". Con este diagnóstico coincide también Lucía Sala, presidenta del Consejo de la Juventud de España (agrupa a entidades juveniles). "Esos dos factores, que son los que más pesan, actúan de forma combinada. Por ejemplo, tanto para comprar como para alquilar una vivienda se necesita una nómina, una estabilidad de ingresos, y resulta que más del 70% de los contratos que tienen las personas entre 18 y 30 años son temporales", afirma la representante juvenil.

De hecho, los datos pormenorizados del INE establecen que de los casi 2,5 millones de adultos jóvenes que viven con sus padres, 1,8 millones tienen empleo. Entre los ciudadanos de 25 a 34 años (6.878.827, según el censo)hay 1,3 millones con contrato temporal, según esa fuente. Por otra parte, de los adultos jóvenes que conviven con sus progenitores, unos 175.000 lo hacen pese a tener pareja y/o hijos.

"Muy pocos jóvenes o adultos jóvenes siguen con sus padres porque quieren o porque les resulte cómodo", asegura la presidenta del Consejo de la Juventud de España. A tenor de las estadísticas que maneja, sólo el 6% de los ciudadanos entre 18 y 34 años convive con sus progenitores porque es más cómodo. Sala afirma que para favorecer la emancipación son imprescindibles políticas públicas que favorezcan el acceso a la vivienda.

De las cifras del INE se desprende, con todo, que la mayoría de las personas entre 25 y 34 años viven fuera del hogar paterno. Un grupo reducido ha optado por hacerlo en soledad mientras mantiene la soltería: 346.290 ciudadanos de esa edad y estado civil tienen un hogar unipersonal. En 1991 eran 112.173. Esta triplicación está relacionada con el alza de personas (casi un millón más) en ese tramo de edad. Sin embargo, ese contingente de población descenderá en más de un millón de personas en los próximos diez años, por el efecto del descenso de la natalidad, prevé el INE.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_