Un 'número dos' con ambiciones
Laurent Fabius, de 58 años, tiene una dilatada carrera política a las espaldas: no en vano fue el primer ministro más joven de Francia, nombrado por François Mitterrand a mediados de la década de 1980, además de haber presidido en otra época la Asamblea Nacional. Fue sobreseído del proceso de la "sangre contaminada" y sobrevivió a la travesía del desierto que hubo de pasar en su propio campo hasta obtener una nueva responsabilidad de gobierno en 2000, año en que Lionel Jospin le nombró ministro de Economía y Finanzas.
Fabius creyó llegada su hora tras la derrota de Jospin en las presidenciales de 2002. Apoyó a François Hollande como primer secretario y él se conformó con el puesto de número dos en la jerarquía del partido, con la vista puesta en reservarse como candidato para las presidenciales de 2007. Enarca, como Hollande, muchos creen que Fabius se ha decidido a acelerar al darse cuenta de que las ambiciones de su joven colega pueden eclipsar las suyas. Enarbolar la bandera de una "Europa social" -y afirmar que esto obliga a rechazar la Constitución Europea- no era el terreno en el que se esperaba a Fabius, tenido hasta fecha reciente como uno de los socialistas más pragmáticos y menos izquierdistas.
