Gales quiere que el Centro del Milenio sea su símbolo de identidad

El homenaje a cinco artistas galeses marcó ayer el momento cumbre de la primera jornada de los tres días de celebraciones por la apertura de un nuevo complejo artístico en la bahía de Cardiff. El Centro del Milenio de Gales, un edificio de nueva construcción que ha costado en torno a los 150 millones de euros, aspira a convertirse en un símbolo nacional del principado además de sede internacional de literatura, música, ópera, danza y teatro.

El Centro del Milenio representa para Gales una apuesta hacia el futuro de envergadura similar al Museo Guggenheim de Bilbao. Diseñado por Jonathan Adams, de la firma británica de arquitectos Percy Thomas Partnership, el nuevo edificio es una pieza esencial en el programa de regeneración de la bahía de Cardiff. Con su vecina sede del Gobierno autónomo, en construcción actualmente sobre planos de Richard Rogers, pretende convertirse en el genuino símbolo nacional galés. "Hemos tardado 18 años en hacer realidad este proyecto, desde su concepción a su nacimiento, pero la espera ha merecido la pena. Es un complejo artístico destinado no sólo a la élite sino a todos los galeses", dijo ayer Rhodri Morgan, ministro principal del principado.

Los artistas galeses fueron los protagonistas de honor de la jornada inaugural, la primera de tres días de importantes celebraciones. Entre ellos, la cantante Shirley Bassey, la soprano Gwyneth Jones, el actor Sian Phillips y el compositor Alun Hoddinott, que recibieron los homenajes en reconocimiento a su dedicación al arte y la cultura. Kate Burton, por su parte, recogió un tributo en honor de su padre, el ya fallecido actor Richard Burton.

Durante el fin de semana, compañías británicas y extranjeras, entre ellas el Ballet Kirov y la compañía circense Cirque Elioze, actuarán en los auditorios del complejo. Una sesión de gala con la presencia de la reina Isabel, el príncipe Felipe de Edimburgo y el príncipe Carlos pondrá punto final a las inauguraciones. La Ópera Nacional de Gales hará los honores durante esta velada real, en la que también se espera la intervención de Charlotte Church, Griff Rhys-Jones, Jonathan Pryce, Bryn Terfel y la Ópera de Ciudad del Cabo. Entre tanto, el público podrá visitar el interior del edificio, asistir a talleres de poesía, recitales gratuitos de música y, como colofón de los actos populares, fuegos artificiales sobre la bahía de Cardiff.

Antes de iniciar su andadura, el Centro del Milenio ya se ha ganado un par de apodos populares. Los galeses hablan de su nuevo emblema como un armadillo, o como una ballena que asoma por la bahía de su principal ciudad. Esto es debido a la coraza metálica que cubre el edificio, cuyo exterior está dominado por tres materiales -acero, pizarra y madera- que simbolizan el pasado industrial y cada una de las regiones de Gales. En su fachada luce una leyenda en inglés y galés, en clave poética.

Siete compañías del principado, incluida la Ópera Nacional de Gales, tendrán su sede permanente en este complejo que cuenta con cuatro auditorios, además de un estudio de grabación, tiendas y restaurantes.

Gancho

Judith Isherwood, anterior directora de la Ópera de Sydney, lleva las riendas artísticas del proyecto más ambicioso emprendido por Gales. Con unas 400.000 localidades en venta durante su primer año, el futuro del centro depende de un público no sólo local, sino británico y extranjero. De momento, sin embargo, el gancho es el propio edificio que, de acuerdo con Owen John Thomas, responsable de Cultura del partido nacionalista Playd Cymru, "ofrece una imagen de Gales como país moderno y con mucha confianza en el futuro".