Tres de cada diez empresas que suspendieron pagos durante los meses de julio y agosto eran valencianas

La Comunidad Valenciana fue la autonomía española en la que más empresas suspendieron pagos en julio y agosto, según los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística. En concreto, 24 de las 81 empresas españolas que recurrieron a este procedimiento para hacer frente a sus dificultades económicas fueron valencianas, lo que supone el 29,6% del total. El desglose por sectores, además, refleja la crisis que atraviesan los sectores tradicionales valencianos, ya que más de la mitad de las empresas que suspendieron pagos realizan actividades manufactureras.

Durante los pasados meses de julio y agosto, 13 empresas valencianas de la industria manufacturera presentaron suspensión de pagos. Esa cifra es más de la mitad del total de empresas valencianas que suspendió pagos durante los dos meses de verano y supera a la media española. En el conjunto del país, el 48% de las empresas que suspendieron pagos en el citado periodo desarrolla su actividad en la industria manufacturera. Seis suspensiones de pagos, por otro lado, procedieron del sector de la construcción y el resto se dividió entre el comercio, las empresas dedicadas a actividades inmobiliarias y de alquiler o las agrarias y ganaderas.

Entre julio y agosto 24 empresas de la Comunidad Valenciana presentaron suspensión de pagos con un pasivo de 90,15 millones de euros. El desglose por provincias muestra cómo Valencia está a la cabeza en esta lista, con 14 suspensiones de pagos, seguida de Barcelona (11) y Madrid y Alicante (10).

El principal motivo para presentar la suspensión de pagos, a nivel nacional, es la falta de liquidez para hacer frente a las obligaciones financieras (55,6%).

La estadística del INE también recoge los datos sobre las declaraciones de quiebra registradas durante los meses de julio y agosto. En el conjunto del país, 216 empresas recurrieron a este procedimiento, 93 de ellas catalanas. De ese total, en cualquier caso, 16 son de la Comunidad Valenciana.

También en las declaraciones de quiebra queda claro el mal momento de la industria manufacturera, que acumuló la mitad de estas declaraciones. A nivel nacional, este porcentaje fue de nuevo inferior (34%).

La estadística presentada ayer por el INE no incluía comparación temporal alguna, como es habitual en estos datos. El instituto recordó que la publicación únicamente de los datos de julio y agosto y no del trimestre completo (el tercero de 2004) obedece a la entrada en vigor de la Ley Concursal el 1 de septiembre pasado, "que modifica sustancialmente la anterior legislación en materia de suspensiones de pagos y declaraciones de quiebra". Por ello, los próximos datos que publique el INE sobre estos procedimientos estarán adaptados ya a la nueva normativa.