El Congreso aprueba los primeros Presupuestos del Gobierno socialista

El Congreso de los Diputados concluyó ayer el debate de los primeros Presupuestos Generales del Estado del Gobierno socialista con la aprobación de todas las secciones que lo integran. De aquí irán al Senado. Si el PNV mantiene su repetido anuncio de vetarlos, junto con los votos del PP, por primera vez en la historia reciente de la democracia española unos Presupuestos serían rechazados por la Cámara alta. Los efectos prácticos serían nulos: el Congreso levantaría ese veto y los aprobaría definitivamente.

En el Grupo Parlamentario Socialista se mantiene un cierto escepticismo sobre la postura final del PNV. Francisco Fernández Marugán, portavoz adjunto del grupo y experto en cuestiones presupuestarias, dijo anoche que "nunca el Senado ha vetado ninguna ley" y que, hacerlo en esta ocasión sería tanto "como renunciar al juego parlamentario, renunciar a introducir cambios en los Presupuestos, con independencia de que luego el Congreso los deje sin efecto, ya que tiene la última palabra".

- Vivienda podrá invertir. La incidencia más notable durante la jornada de ayer la protagonizaron las cuentas del Ministerio de la Vivienda. Se debatieron por la mañana con la teórica amenaza de un recurso que había presentado el PNV ante la Mesa. El recurso afectaba al voto particular del PSOE, ERC e Izquierda Verde (IV), que anulaba una enmienda de los nacionalistas vascos aprobada en comisión con el voto de todos los grupos nacionalistas más IV y el PP, por la que se redistribuían 539 millones de euros entre las comunidades autónomas para ayudas en la adquisición y rehabilitación de viviendas.

El portavoz del PSOE, Francisco Contreras, dijo que mantener la enmienda del PNV era tanto como "desmantelar" el ministerio. Finalmente, la Mesa aceptó el voto particular del PSOE, ERC e IV y la enmienda desmanteladora pasó a convertirse en anécdota parlamentaria. El PNV advirtió de que piensa recurrir la decisión de la Mesa ante el Tribunal Constitucional. Dados los plazos con los que trabaja el más alto tribunal, y aunque prosperase el recurso, sus efectos serían puramente testimoniales.

Durante el debate, Joan Puig,de ERC, además de dejar claro, una vez más, que su partido aspira a que Cataluña sea "una nación libre en el contexto de las naciones europeas", anunció que "sencillamente" iban a "rectificar" su voto en comisión y dedicó al PP un reproche lleno de significado político, por haber apoyado la enmienda del PNV en la Comisión de Presupuestos: "Pasó", dijo Puig, "lo que uno, por coherencia, no esperaba, que el Partido Popular se apuntase a desmantelar el Estado, a vaciar de competencias el ministerio" [de Vivienda]. No aclaró Puig, expresamente, si su partido, ERC, efectivamente, se ha apuntado a desmantelarlo.

La ministra de la Vivienda, María Antonia Trujillo, en la defensa de su presupuesto, no mencionó el incidente de la enmienda que de haberse mantenido hubiera tenido efectos catastróficos para su departamento y destacó que pretende que 180.000 familias accedan a una vivienda protegida en 2005 "para que el precio de la vivienda libre suba cada vez menos hasta que alcance su estabilidad".

- "Filibusterismo". El debate del presupuesto de Cultura ofreció el enfrentamiento más agrio, formalmente, de la jornada, pero entre dos grupos de oposición: CiU y PP. Los nacionalistas catalanes habían aceptado una enmienda transaccional a otra pactada con los socialistas que asignaba un millón de euros al Instituto Ramon Llul para promoción en el exterior de la lengua y la cultura catalana.

El PP quiso mediar en la transaccional y propuso que el dinero fuese para todos los idiomas reconocidos oficialmente en los Estatutos de autonomía y el diputado de CiU Josep Sánchez Llibre le acusó de ejercer el "filibusterismo parlamentario" porque, la apariencia de apoyar la asignación suponía un tropiezo reglamentario, casi insalvable, de modo que CiU terminó por retirar su enmienda no sin achacar al PP que todos sus intentos están encaminados a "boicotear" el fomento de la lengua catalana.

- Austeridad en Economía. El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, defendió los Presupuestos de su ministerio insistiendo en que se habían elaborado con criterios de "austeridad", además de "rigor y transparencia". Solbes destacó también el propósito de luchar contra el fraude fiscal, para lo que se destinan a la Agencia Tributaria 1.110 millones de euros, un 2,6% más que el año pasado con el Gobierno del PP.

El portavoz del PP, Miguel Arias Cañete, atacó con dureza el discurso del PSOE, le acusó de "presumir de transparencia", pero no de practicarla porque, pese a haber prescindido de la llamada Ley de Acompañamiento, los Presupuestos la contienen, dijo, de forma encubierta.

Arias Cañete habló también de ausencia de modelo económico y de mantener una previsión de crecimiento para el año próximo del 3% "contra viento y marea", pese a que los indicadores económicos no apuntan en esa dirección.

Los presupuestos del ministerio de Administraciones Públicas se debatieron el martes pero se votaron ayer, con la incorporación de una enmienda pactada entre PSOE e IV por la que el Fondo de Compensación a los ayuntamientos se incrementa en medio millón de euros.