Rehabilitar el centro de Málaga costará 100 millones

La Junta de Andalucía prevé unas inversiones públicas de distintos organismos de unos 100 millones de euros en los próximos nueve años para rehabilitar y revitalizar 40 hectáreas en el entorno del centro histórico de Málaga. A esta previsión habrá que sumar además la inversión que realicen los particulares en el acondicionamiento y rehabilitación de sus viviendas, para lo que dispondrán de subvenciones y ayudas públicas que desde hoy mismo pueden tramitar en la oficina de rehabilitación inaugurada ayer.

El programa afecta a tres zonas que suman 40 hectáreas y que forman parte de los primeros arrabales por los que se expandió Málaga a extramuros de las murallas que delimitaban la ciudad musulmana. Son tres áreas en el entorno de las calles Carretería y Álamos, que siempre se han considerado perímetro del casco histórico, y en el eje de la calle Victoria.

"Se trata de incorporar centro al centro", explicó ayer el arquitecto autor de los estudios previos, Salvador Moreno Peralta, quien se quejó de que este área tradicionalmente no ha sido considerada centro en jerarquía, pese a su centralidad geográfica, y que ha quedado despoblada y abandonada con un alto grado de deterioro urbanístico y desvertebración social.

Curiosamente, en esta zona, destacó el arquitecto, existe una interesante arquitectura civil del siglo XVIII cuya recuperación es uno de los objetivos del programa de rehabilitación.

Moreno Peralta resaltó que el objetivo no es sólo recuperar la zona como lugar de residencia, sino también como centro de actividad productiva y de ocio. Entre los proyectos contemplados figura por ejemplo la construcción de viviendas para jóvenes en régimen de alquiler que dispondrían además en una planta baja de locales para el trabajo. Con este motivo, la rehabilitación tendrá en cuenta la incorporación de infraestructuras para el uso de nuevas tecnologías como fibra óptica o líneas telefónicas de alta velocidad.

"Queremos rehabilitar para crear actividad, no para expulsar", dijo el director general de Arquitectura y Vivienda, José Mellado, quien aseguró que el futuro de estas zonas dependen de que haya "vida y negocio", por lo que "hay que proteger al pequeño comercio, a los autónomos y a las nuevas actividades".

Además de la rehabilitación de viviendas, y edificios civiles para equipamiento social y cultural, los programas requieren un rediseño de la trama urbana y la peatonalización de calles.