Retrospectiva de Oppenheim con pinturas, maquetas, fotos y máquinas

Un conjunto de tubos de acero, luces eléctricas, bombillas rojas, piezas de fibra de vidrio, rodillos y otros elementos componen la escultura Máquina candorosa, una de las 34 creaciones del escultor y pintor estadounidense Dennis Oppenheim que se pueden contemplar hasta primeros de diciembre en el museo vallisoletano Fundación Cristóbal Gabarrón. Esta muestra, titulada Del arte conceptual al arte objetal y la escultura monumental, está formada por 21 esculturas y 11 obras en diversos soportes, además de una película y dos documentales sobre la vida del artista, cuya obra se expone en más de setenta museos y colecciones públicas del mundo.

Oppenheim (Washington, 1938) está considerado como uno de los creadores más destacados del arte conceptual y ha ejercido una considerable influencia en distintas generaciones de pintores y escultores desde que iniciara su andadura instalando, en 1966, su primer taller en Nueva York, donde reside desde entonces. Esta exposición ha sido calificada de única por el propio artista. La selección de la muestra, una retrospectiva de las obras realizadas de 1968 a 2004, ha sido hecha por el artista, y contiene una amalgama de elementos que ironizan sobre la sociedad americana mezclando objetos de la cultura pop con utensilios de cocina, juguetes u otros propios de la sociedad de consumo. Así, es posible contemplar fotografías en blanco y negro y color, pinturas lineales en sepia, una maqueta en madera, esculturas de acero bañado en cobre o piezas de fibra de vidrio que se mezclan con taladradoras eléctricas, enchufes, temporizadores y algún motor.

Los organizadores califican como de "muy significativas" dos piezas en las que se aprecia la ambigüedad y originalidad de Oppenheim: Digestion y Heavy dog kiss. Además, uno de sus trabajos más conocidos es su monumentohomenaje a las víctimas de la dictadura en Argentina.

Metáforas del pensamiento

El contenido de esta muestra ofrece una visión de diversas etapas de este provocador, uno de los inventores del "arte corporal o la creación en el cielo, mediante bengalas, diferentes dibujos inspirados en vivencias personales. En los setenta, Oppenheim se alejó todavía más del concepto de artista convencional creando intervenciones e instalaciones que incluyen objetos que él mismo bautizó como "metáforas del pensamiento" y que incorporaban grabaciones con su voz y experiencias de pigmentación sobre el cuerpo utilizando labios, dedos y hasta sus propias uñas. En otras etapas se dedicó a crear complejas estructuras de metal con elementos eléctricos, algunos de los cuales pueden verse en la exposición.

Oppenheim tiene obra permanente en el Museo de Arte Reina Sofía, el MOMA neoyorquino, el Centro Pompidou de París y la Tate Gallery de Londres, entre otros. La exposición vallisoletana tiene carácter itinerante y los organizadores han previsto que recale más tarde en Madrid, Valencia y Sevilla.