Agricultura propone al sector desvincular parcialmente las ayudas
El objetivo es mantener la actividad agraria y fijar la población rural
El Ministerio de Agricultura propondrá al sector agrario un desacoplamiento (recibir ayudas sin que haya producción) parcial para el pago de las ayudas directas de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC). Para el secretario general de Agricultura, Fernando Moraleda, se trata de mantener la mayor actividad en el sector, defender las zonas más vulnerables, y fijar la población y los profesionales jóvenes que viven en el medio rural.
La reforma de la Política Agraria Común (PAC) en junio de 2003 contemplaba un desacoplamiento total en los pagos de las ayudas directas con carácter general (cobro de una ayuda en función de unos derechos históricos sin obligación de producir). Sin embargo, dejaba abierta la posibilidad a cada Estado miembro para que, en una serie de producciones como herbáceos, vacuno, ovino, caprino y lúpulo, se pudieran aplicar desacoplamientos parciales en el pago de las ayudas con un abanico de opciones.
Esta posibilidad ha sido motivo de división en los últimos meses entre comunidades autónomas y las propias organizaciones agrarias. Mientras unas organizaciones consideraban que el desacoplamiento parcial era fundamental para evitar abandonos de actividad, desde otras posiciones se defendía un pago totalmente desacoplado y dejar libertad a cada explotación para la actividad que más le interesara.
Frente a estas posiciones, Agricultura propondrá al sector la aplicación del sistema de pagos desacoplados en los porcentajes que permite la normativa comunitaria tras la reforma. Para los responsables de este departamento, un desacoplamiento total en las ayudas, (cobrar sin necesidad de producir) supondría un riesgo para el mantenimiento de la actividad económica en el medio rural. Agricultura entiende que el desacoplamiento podría provocar a medio plazo una deslegitimación de las ayudas ante el resto de la sociedad si se reciben ayudas sin ejercer actividad económica. Para Agricultura, si se inicia la aplicación de la reforma con un desacoplamiento parcial es posible llegar en el futuro a un desacoplamiento total, algo que no sucedería a la inversa. Agricultura propone:
- Herbáceos. Mantener el 25% de los pagos acoplados. Se abre la posibilidad de revisar los índices de barbecho con vistas a su desaparición, así como flexibilizar la retirada voluntaria. La ayuda al trigo duro quedaría desacoplada.
- Ovino y caprino. Se mantendría acoplado el 50% de los pagos para frenar abandonos.
- Vacuno. Agricultura opta por mantener acoplado el 100% de los pagos para la vaca nodriza; acoplamiento del 100% de la prima al sacrificio de terneros y el 40% de la prima al sacrificio de animales adultos.
- Lúpulo. Se mantiene acoplado el 25% de la ayuda.
- Aceite. Bruselas requiere que los pagos desacoplados sean como mínimo del 60%. El Ministerio de Agricultura estudia llegar a un desacoplamiento muy elevado, así como la posibilidad de modulación para apoyar al olivar de baja producción.
- Tabaco. La reforma contempla mantener el 60% de la ayuda acoplada hasta 2010.
- Algodón. La reforma aprobó un 65% de los pagos desacoplados.
- Leche. Incorporación total de la prima láctea al pago único en 2006.
Al margen de la vinculación parcial de las ayudas a la produccion, de acuerdo con la reglamentación comunitaria, los Estados miembros de la Unión Europea (UE) tienen la posibilidad de deducir hasta un 10% de las ayudas para pagos adicionales. Agricultura propone que ese recorte sea del 5% y que esos fondos se destinen a apoyar la sostenibilidad de las explotaciones más vulnerables en zonas desfavorecidas.
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