_
_
_
_
VIOLENCIA EN IRAK

Daños en la residencia del embajador de España

Ramón Lobo

La residencia del embajador de España en Bagdad, Marcos Vega (encargado de negocios en funciones de jefe de misión), resultó ayer dañada por la onda expansiva de un coche bomba que estalló a tres manzanas de distancia. El objetivo del conductor suicida era un convoy estadounidense que circulaba por la calle principal, cerca del Club de Campo, en el barrio de Al Mansur. Cuatro soldados de EE UU resultaron muertos, según la BBC.

"La explosión fue impresionante. Nos hemos llevado un susto, pero estamos todos bien. Se han roto algunos cristales y varias puertas están desencajadas. También hay restos de metralla y de un coche en el jardín y la piscina. La onda expansiva ha sido muy fuerte. El atentado ha ocurrido a unos 50 metros de nosotros", aseguró Vega a EL PAÍS.

Más información
Irak pondrá en libertad a la Doctora Germen, como exigen los secuestradores

La Embajada, próxima a la residencia, no sufrió daño alguno, pero se vio sacudida por la explosión. En esa zona de la capital de Irak se concentran la gran mayoría de las representaciones extranjeras (menos las de EE UU y Reino Unido, que están en la zona verde, mejor protegida). España, igual que Alemania, trasladó hace unos meses su legación a una calle interior más protegida. Los muros exteriores de la anterior daban a una concurrida avenida y la distancia entre esa tapia y la casa era de seis metros (lo mínimo deben ser 25, según los expertos en seguridad). Ese barrio diplomático no es el de un país en paz: tráfico cortado, calles salpicadas de decenas de barreras que obligan a circular muy despacio y en zigzag, pivotes en el asfalto para hacer saltar los coches y advertir de la presencia de una bomba adosada... Las casas, la mayoría elegantes, están rodeadas de muros de hormigón, sacos terreros y alambres de espino. Se suceden los puestos de control, las barreras protegidas por guardas iraquíes y las obras para elevar los muros o levantar otros. Cada embajada y residencia cuenta con policías propios.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_