Europa y EE UU intercambiarán datos sobre los terroristas
La UE pregunta a Washington qué piensa hacer con la información sobre viajeros
El intercambio de información es crucial para la lucha antiterrorista entre ambos lados del Atlántico. Éste fue el mensaje lanzado ayer tanto por Washington como por Bruselas en La Haya (Holanda) tras el encuentro mantenido por el secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, Tom Ridge, y los responsables europeos de Interior de la Comisión, Antonio Vitorino, y de la presidencia holandesa de turno, Piet Hein Donner.
A pesar de que entre ambas partes se constata un espíritu más distendido tras la crisis de Irak, la UE aprovechó el encuentro para pedir a Ridge que clarifique el uso que la policía federal (FBI) hará de los datos de los viajeros que entren en ese país.
El interés mutuo de mejorar los controles fronterizos y los transportes marítimos y aéreos facilita un diálogo transatlántico que, según los reunidos ayer, hay que convertir en frecuente. "Estamos analizando cómo intensificar la cooperación en los próximos años", dijo Donner tras la reunión. "Entre las prioridades comunes está la lucha contra la financiación del terrorismo, el intercambio de información y los servicios de inteligencia".
"El corazón de la lucha antiterrorista es el intercambio de información", corroboró Ridge. "Tenemos muchísimos datos sobre los huracanes para prevenirlos, pero necesitamos más información sobre esos otros desastres no naturales, como el terrorismo, para prevenirlos también". Ridge aseguró que ve grandes logros al respecto en Europa, con destacadas detenciones, y señaló la importancia de compartir experiencias y de desarrollar todos los medios tecnológicos para mejorar la cooperación antiterrorista.
Donner, al igual que Vitorino, no perdió la ocasión de evocar el principal punto de fricción que separa a la UE de Estados Unidos sobre el acceso a los datos personales, sin que ello suponga un ataque a la confidencialidad. El lunes pasado, Washington informó a la UE de su proyecto de dar acceso directo a los datos de inmigración al FBI: los datos habituales del pasaporte más la foto y las huellas dactilares que se recogen en las fronteras. En Bruselas se valora el hecho de que, al menos, Estados Unidos haya avisado y Ridge mostró cierta comprensión hacia las demandas europeas. "Ahora podemos hablar directa y francamente sobre los asuntos que nos preocupan", dijo el político estadounidense, que insistió en las garantías que Estados Unidos ofrece en la confidencialidad de los datos que ya se están recogiendo de los pasajeros aéreos.
Una prueba de las buenas intenciones de Washington para limar asperezas la dio Ridge también ayer, al manifestar públicamente el interés estratégico de Estados Unidos en facilitar la entrada a su país de los ciudadanos europeos tras las restricciones impuestas a raíz de los atentados del 11 de septiembre de 2001. "Estamos haciendo cambios significativos en el control de fronteras", dijo, "porque para nosotros es importante que los estudiantes u hombres de negocios de nuestro socio económico más importante, la UE, sigan viniendo".
En esta atmósfera, ambas partes acordaron ayer posponer la entrada en vigor de los pasaportes biométricos, que incluirán foto digital y huellas dactilares, además de los datos habituales. Según fuentes de Bruselas, ninguna de las dos partes es capaz de poner en marcha los nuevos pasaportes para octubre de 2005, como estaba previsto. En la reunión de ayer, se acordó que los nuevos pasaportes se exijan sólo a partir de octubre de 2006. "Empezaremos a dar los primeros pasos en el último trimestre de 2005", aseguró ayer Vitorino.
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